MÉXICO.-Una contingencia mundial puede representar un parteaguas en diversos aspectos, uno de ellos es la contaminación ambiental. De cara a la nueva normalidad, en la que la sociedad global debe adaptarse a las medidas sanitarias que facilitan lidiar con el COVID-19 en la vida diaria, también se deben replantear algunas acciones que favorezcan al medio ambiente.
En la medida que sea posible, se recomienda el uso de bicicleta o de traslados a pie según sea el trayecto. Esta medida, además de favorecer al medio ambiente, contribuye a tener una buena salud física y mental.
Si el uso del vehículo es inevitable, lo ideal es programar todos los viajes para que en una sola salida del hogar se puedan realizar todos los pendientes y no tener que salir en varias ocasiones durante el día.
Otra opción en cuanto al vehículo, es combinar y compartir este medio para los traslados. Por ejemplo, con los compañeros de trabajo o escuela. Cabe recordar que durante la nueva normalidad, el uso de cubrebocas es obligatorio mientras se transita y no se debe sobrepasar el cupo de cuatro personas por auto.
Por otro lado, el transporte público también es otra forma de trasladarse y de evitar que muchos autos emitan contaminantes al mismo tiempo.
La energía que se consume en casa
El uso de energía eléctrica en el hogar se puede reducir con acciones muy simples tal como:
-Desenchufar todos los aparatos electrónicos que no estén en uso y que no es indispensable que se mantengan conectados.
-Apagar las luces que no se necesiten en el momento.
-Administrar correctamente los ciclos de lavado de ropa para aprovechar las cargas de la lavadora.
-Utilizar la secadora sólo cuando sea verdaderamente necesario, en otro caso, tender la ropa en el exterior.
-Colocar lámparas y focos de bajo consumo, mismas que son de las más económicas en el mercado.
-El uso de ventiladores consume menos energía que el aire acondicionado fijo.
Compras ecológicas
Al momento de acudir al supermercado recuerda llevar tus propias bolsas para el momento de empacar los productos y llevarlos a casa. Esta acción reduce considerablemente el uso de bolsas plásticas que tardan décadas en desintegrarse y que contaminan el medio ambiente durante este proceso.
Recicla y separa la basura
Si se reciclan materiales como plástico, PET, papel, vidrio, aluminio o cartón, se contribuye al ahorro de recursos naturales y se reduce el volumen de residuos.
Lo recomendable es separar los residuos por botes de colores para facilitar que toda la familia se involucre.
Verde-Orgánicos: residuos y cáscaras de frutas y verduras, huesos y restos de carne, residuos de pan, tortilla, etcétera.
Gris-Inorgánicos reciclables: envases y empaques de papel, cartón, vidrio, plástico y bolsas de frituras.
Naranja-inorgánicos no reciclables: unicel, toallas sanitarias, hisopos, preservativos, curitas y pañales.
Mientras las dinámicas sociales se retoman poco a poco y nos adaptamos a la nueva normalidad, no olvides que nos encontramos en una pandemia. Por eso es importante que extremes medidas sanitarias portes cubreboca, laves tus manos con jabón, uses gel antibacterial, además de desinfectar calzado y objetos de uso común.
CON INFORMACIÓN DE VANGUARDIA