CD. DE MÉXICO.-La cooperación internacional ha sido esencial para que México logre acceder a la vacuna contra la COVID-19, enfermedad que ha cobrado la vida de 55.908 personas y registradas 511.369 contagios en esa nación. En esta misma semana, los Gobiernos de México y Argentina con AstraZeneca, la Universidad de Oxford y la Fundación Carlos Slim, anunciaron un acuerdo que llegará a la industria mexicana iniciar la producción de la vacuna AZD122, a partir del primer trimestre de 2021.
De acuerdo con AstraZeneca, la sustancia activa de la vacuna se desarrollará en Argentina para después enviarse a México, desde donde se distribuirá a casi toda América Latina y el Caribe. En noviembre, el laboratorio presentará los resultados de la fase 3 de su desarrollo y, en cuanto las autoridades sanitarias de México emitan una certificación, el país iniciará la producción de la vacuna, cuyo estimado oscilaría entre las 150 y 250 millones de dosis.
Además de este reciente acuerdo, México está incluido en más protocolos de investigación para el desarrollo de la vacuna contra el nuevo coronavirus. En mayo, el Gobierno federal anunció su participación en un bloque internacional para promover la creación de la vacuna, en el que colaboran expertos mexicanos.
En julio, las autoridades sanitarias dieron a conocer que México participa en la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias, la Alianza Global de las Vacunas e Inmunización y la Organización Mundial de la Salud. Ese mismo mes, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, anunció que su país se incorporaría al primer protocolo fase 3 para la vacuna del laboratorio Sanofi-Pasteur y que se harán pruebas en la nación.
A principios de agosto, el Gobierno federal acordó con la compañía estadounidense Janssen Pharmaceuticals y las chinas Cansino Biologics y Walvax Biotechnology que México participará también en la fase 3 del ensayo clínico de la vacuna. De acuerdo con el director médico y de Asuntos Regulatorios de la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF), Fernando Fon, los logros que se han obtenido en México son un ejemplo de colaboración entre distintos actores: la academia, los cuerpos científicos y los Gobiernos.
Se trata de un esfuerzo compartido, dijo Fon, en el que México ha sido pieza clave para impulsar el desarrollo de la vacuna en la región pues, desde el primer caso de coronavirus en la nación (el 28 de febrero pasado), se ha buscado la manera de estar presente. ” La vacuna se ubica en la primera fase de evaluación en modelo animal y se proyecta que para el siguiente año se inicien las pruebas clínicas en humanos.
En el desarrollo de la vacuna mexicana participantes especialistas de la UNAM, en conjunto con diversas instituciones públicas y con el Gobierno de la Ciudad de México. En la actualidad, la Organización Mundial de la Salud (OMS) tiene registrados 160 proyectos de vacunas contra la COVID-19, más de 20 de ellos en la fase de pruebas clínicas. Aleta más de 20 de ellos en la fase de pruebas clínicas. Aleta más de 20 de ellos en la fase de pruebas clínicas.
CON INFORMACIÓN DE: EL DEBATE