A20 meses de los 70 que gobernará México el presidente Andrés Manuel López Obrador, muy lejos está de lograse la tan ofrecida, vendida y comprada por la mayor parte de los ciudadanos Cuarta Transformación que buscaba serenar al país y allegarnos de felicidad; la cruel realidad es que han sido unos 600 días donde la constante es la muerte, el enfrentamiento entre mexicanos y una retahíla de noticias catastróficas.
Así es mis queridos boes, es cierto, hay más pobreza extrema, unos 12 millones más que los que le dejó a AMLO el periodo neoliberal, también es cierto, hay cuando menos 3 millones de desempleados nuevos en estos 20 meses, también lo es que miles de empresas ya cerraron para no volver a abrir; todo eso tiene solución, pero el saldo de muerte ese si no hay forma de arreglarlo.
Y en ese conteo, el de López Obrador ha sido un sexenio de números históricos, podría decirse que en sus 20 meses al frente del Ejecutivo Federal México se ha transformado en un panteón.
Somos un país inundado por el dolor y golpeado por el desdén oficial a las cifras aterradoras de decesos, que pudieron haberse evitado, no en su totalidad pero una buena parte de los mexicanos que han muerto trágicamente en estos 20 meses si estarían con nosotros si se hubiesen implementado las estrategias adecuadas.
La muerte golpea a México por dos flancos, por el de la violencia que genera el crimen organizado y la que trajo apenas hace 5 meses el Covid-19, entre ambos fenómenos han enlutado a miles de mexicanos.
Ya habíamos dicho que el 2019 fue el año más violento en un siglo en México; con 34 mil 582 asesinatos, más que el 2018 que había sido considerado el más violento hasta entonces.
El asunto, es que en los primeros seis meses de este 2020, la cifra de muertos por la violencia que azota al país desde hace más de una década, llegó a 58 mil 545. Son datos del Secretariado del Sistema Nacional de Seguridad Publica, es decir oficiales y no se cuentan los de junio y julio, porque no han sido oficializados por la institución.
La guerra de bandas deja al día entre 90 y 100 muertos; hay jornadas más violentas, pero en un día normal; esa el la cifra mortal. Y hay que decirlo; eso es lo doble de los muertos que ocurrían en el mismo periodo del ex presidente Felipe Calderón y 55 por ciento más que con Enrique Peña Nieto, insisto lo dicen las cifras oficiales.
Con Calderón, a quien cita AMLO todos los días, en el mismo periodo de tiempo se contaban en México 38 mil muertos; hoy llevamos casi el doble. La gran diferencia es que al gobierno de la 4T se le sumó un enemigo no considerado, el Covid-19, más letal que los narcos y en solo 5 meses ha matado a 57 mil 23 personas en el país, según también cifras oficiales; las extraoficiales dicen que pueden ser casi 160 mil.
Quedándonos solo con las que cuenta el gobierno de AMLO, sumadas a las de la violencia de los malos; estamos hablando de que en nuestro México tan golpeado, tan saqueado, tan engañado han muerto más de 195 mil personas solo por esas dos causas y esto significa que todos los días mueren casi 200, a unas las mata el Coronavirus y a otras las matan los malos.
Más de 8 muertos cada hora; cuatro los delincuentes y cuatro el Covid-19; dos enemigos de los mexicanos a los que los de la 4T habían prometido eliminar en corto tiempo, ambos fuera de control, los dos muy ausentes de la agenda del presidente que prefiere pelearse con todos los que no piensan y opinan como él; tal vez para dar la nota distinta y tratar de evitar que se hable de la muerte que nos persigue a diario.
No se cuántos muertos por la violencia se hayan podido evitar si López Obrador y Alfonso Durazo hubiesen implementado una estrategia exitosa, pero está bien claro que lo que nos prometieron era acabar con la guerra, detener el baño de sangre y el baño ya se convierto en un mar. Porque los abrazos no funcionaron contra los balazos, porque coquetear con la familia del mayor capo de la historia del país y liberar a su hijo los hizo más fuertes, porque fingir que no existen los hizo a todos más fuertes, más violentos.
El número de muertos me da la razón. Tampoco sé cuántos muertos por el Covid-19 se pudieron evitar si se hubieran cerrado las fronteras como en la mayoría del mundo, si el presidente López Obrador no hubiera llamado a la gente a salir a comer, a abrazarse e insistir en que el Coronavirus que ya estaba matando gente no era más que una gripita y que con estampitas religiosas se alejaba.
No se cuántos muertos pudo haber evitado una campaña del presidente a favor del uso del cubrebocas, como lo recomendaba la OMS, siendo que es el líder más influyente del país y que sus fans le creen a ciegas, pero hasta ayer se recusaba a utilizarlo y seguro no lo hará.
Lo que si se y ustedes también y no debemos olvidarlo es que por las estrategias fallidas contra la violencia y contra el Covid-19, mueren en este país unas 200 personas al día, mientras AMLO busca pleitos y la felicidad que nos prometió se aleja cada vez más. QEPD los 195 mil mexicanos que en 20 meses le contamos a la cuenta del mesías tropical.
POR MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA