PUEBLO VIEJO, VER.-En lo que será un evento marcado por la emergencia de salud del coronavirus, mañana por la noche se llevará a cabo la celebración del grito de Independencia en Pueblo Viejo.
Al respecto de la logística y los pormenores del que sin duda es festejo patrio más importante a nivel nacional, el alcalde Luis Fernando Cervantes Cruz, destacó que todo está listo para llevar a cabo el protocolo de la ceremonia oficial de la celebración del grito.
En este aspecto hizo muy especial referencia a las condiciones sanitarias enmarcadas por la problemática del covid-19 las cuales no permiten concentraciones masivas por ello el evento en este sentido exhorto a la población a que no acudan a la plaza y se mantengan en sus hogares.
Agregó qué será alrededor de las 22:45 horas de la noche que inicie de manera oficial el protocolo de los honores patrios encabezados por la siempre imponente presencia de la escolta y la banda de guerra de El 51o batallón de infantería.
Destacó que se realizará el grito de la forma tradicional desde el balcón donde serán vitoriados, los héroes que nos dieron patria y libertad siendo el alcalde acompañado solo por autoridades del cabildo, para posteriormente dar paso a un espectáculo de juegos pirotécnicos que dijo serán la gran sorpresa de la noche para la alegría de los pueblos.
Cervantes Cruz indicó que las familias y toda la ciudadanía en general podrá seguir por las diversas plataformas digitales la transmisión de este evento y con ello podrán unirse a la realización del grito.
” Debemos mostrar con ello que pese a las circunstancias de la pandemia la gente de Pueblo Viejo está unida y enfrentará y superará la adversidad que agobia en estos momentos al país y aunque no estemos presentes en la plaza si lo podemos hacer a través de la tecnología y en familia”.
El alcalde también aprovechó para invitar a la población a que festejé de manera sencilla, sin incurrir en riesgos a la salud al realizar festejos donde puedan concentrarse muchas personas recordando también que no se aplicará la ley seca.
POR Víctor Montiel/ La Razón