CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Luego de ser excluidos cinco municipios en la Fase 2, en los que están incluidos Matamoros, Tampico, Madero, Altamira y Mante, decretado esta semana por el Consejo General de Seguridad en Salud de Tamaulipas, mismos que permanecerán en Fase 1 hasta el 30 de septiembre con una apertura económica restringida, la Federación de Cámaras Nacional de Comercio del estado anunció que se solicitará a las autoridades de salud que reconsideren su postura y les permita pasar a Fase 2 a todos los municipios.
Abraham Rodríguez Padrón, director de FECANACO Tamaulipas, aseguró que todos los municipios se comprometen a seguir cumpliendo con los filtros sanitarios para evitar que sigan aumentando los casos de COVID-19.
La crisis económica provocada por la pandemia ha provocado que en varios municipios como Matamoros, el comercio organizado declare al 2020 como año perdido para su economía, en virtud que en seis meses no han podido reactivarse y el cierre de negocios ya es casi de todos los días.
La Federación de Cámaras está planteando lo mismo que el presidente de CANACO Matamoros, técnicamente las empresas que no han podido abrir como cines, gimnasios, salones de eventos, playas y otros, ya están quebradas, y otros 15 días más es un tiro de gracia que les están dando, al extender la Fase 1 por dos semanas más en los municipios como Tampico, Madero y Matamoros, donde se concentra un importante número de pequeños negocios que les imposible seguir soportando esta situación.
Insistió en que es algo devastador para la economía de la ciudad fronteriza de Matamoros, donde no solo no se permite la apertura económica en la ciudad, sino que las fronteras están cerradas provocando pérdidas económicas aún mayores a las que se habían estimado.
Todo esto les será planteado a las autoridades estatales, a efecto de que reconsidere las decisiones que se están tomando en cuanto a las fases a las que deben pasar los municipios, la tardanza de la apertura es lo que ya está ocasionando cierre de empresas todos los días.
Por Salvador Valadez C.
