PUEBLO VIEJO, VER.- Cae la tarde en la congregación primero de Mayo en Pueblo Viejo y en una humilde vivienda de este sector se tiene preparada una gran sorpresa para alguien muy especial.
Se trata del joven Juan Diego el cual cuenta con 17 años de edad y desde su nacimiento fue diagnosticado con parálisis cerebral psicomotora, por ello su vida no ha sido fácil, pero el amor de sus padres adoptivos ha marcado la gran diferencia.
Pese a que cumplió años el pasado 2 de junio Juan Diego manifestó el deseo de tener una fiesta con la presencia de un payasito que animara la reunión y la tarde del martes su deseo y otras por sorpresas más se vivirían en su humilde hogar.
A este sitio arribaron las maestras Beatriz Yamizel Cruz y Cintia Gómez, que forman el grupo de apoyo para las para los más necesitados «CAVE».
Las cuales atendiendo la solicitud de apoyo de la señora Francisco orduña Elías, madre de Juan Diego hicieron acto de presencia llevando diversos apoyos desde despensa, apoyo en efectivo y una gran noticia.
En esos instantes ataviado de traje azul y luciendo su característico pelo rojizo el payasito ,»Charly» uno de los más conocidos en Pueblo Viejo,hizo su sorpresiva aparición para saludar a Juan Diego, el cual de inmediato mostró su emoción en su mirada y los gritos de alegría inundaron el ambiente
De esta forma se procedió al festejo atrasado de cumpleaños de Juan Diego, el cual se forma al sorprendente coincide con el del payasito Charly que también le entregó su pastel de cumpleaños.
Además le obsequio de una gorra diseñada especialmente para él y le extendió un contrato para hacerle un show especial en su próximo, cumpleaños llevando su equipo de sonido e iluminación para el y sus amigos.
En tanto las docentes altruistas Beatriz y Cintia informaron a la madre de Juan Diego sobre la donación de la silla especial que requiere para desplazarse la cual fue producto del buen corazón de una persona que pidió quedar en el anonimato.
Esto porque su anterior silla ya estaba ya muy deteriorada e inservible, las integrantes el grupo de apoyo dieron conocer que también están en el proceso de reunir fondos para la compra de una silla de ruedas para la abuela de Juan Diego, la señora alma quién de 90 años de edad a la cual hace un mes le fuera amputada su pierna derecha y su actual silla está en terribles condiciones.
Tras estos compromisos y las buenas noticias se vivieron momentos especiales que revelan que existe el amor al prójimo y que los sueños se pueden hacer realidad.
Por Víctor Montiel/ La Razón