El tema de replantear un nuevo federalismo donde se distribuya de forma más equitativa el presupuesto de egresos de la federación hacia las entidades ha sido uno de los temas recurrentes en las últimas semanas, que ha sido impulsado por 10 estados del país que se integraron en la alianza federalista para realizar dicha demanda. Los gobernadores pertenecen a los estados de Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas, Durango, Michoacán, Jalisco, Colima, Guanajuato, Chihuahua y Aguascalientes.
El planteamiento base de este grupo de gobernadores es el que sus estados contribuyen de forma significativa en la recaudación tributaria, situación que no se corresponde con el presupuesto federalizado que se le designa a cada uno de estos.
Ante tal confrontación, entre los estados, la federación y los legisladores se ha creado un ambiente de incertidumbre entre los empresarios y la población en general, debido a que cada uno plantea sus puntos de vista desacreditando los planteamiento del otro, perfilando sus posicionamientos desde una perspectiva política más que desde un razonamiento lógico que siente sus bases en la aplicación eficiente de los recursos y sus efectos multiplicadores.
Hablando puntualmente del estado de Tamaulipas, los datos de la SHCP señalan que en 2018 Tamaulipas recaudó aproximadamente 275 mil millones de pesos por concepto de impuestos, colocándose como la segunda entidad que más recauda. Por concepto de IVA, se recaudaron en el estado, en ese mismo año, aproximadamente 210 mil millones de pesos, ocupando el segundo lugar en el país después de la Ciudad de México. Para poner en contexto esta situación, en Tamaulipas se recibieron por concepto de gasto federalizado alrededor de 50 mil millones de pesos en ese mismo periodo, es decir, de todo lo recaudado ese año solo se regresó 18 por ciento, aproximadamente. Es innegable la participación que tiene el estado de Tamaulipas en los ingresos del país lo que, sin lugar a duda, contribuye al desarrollo nacional. Este es un hecho económico, no político.
Ahora bien, en 2020, el gasto federalizado destinado para que los ejerza el estado de Tamaulipas fue de 56,102.4 millones de pesos y para 2021 se aprobaron 56,187.9 millones de pesos, es decir, 85.5 millones de pesos más. Pero se debe considerar que el incremento de los precios, de acuerdo a las estimaciones de la federación, será de aproximadamente 3.4 por ciento. Lo que significa esto es que para que el estado de Tamaulipas pueda realizar las mismas actividades de 2020, el presupuesto se debería haber incrementado en 1,907 millones de pesos y no en los 85.5 millones que se incrementó. Este hecho económico lo que señala es que en el estado de Tamaulipas en 2021 se tendrán menos recursos.
Pero el impacto negativo para el estado de Tamaulipas en el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2021 es aun mayor cuando se considera el rubro de subsidios y proyectos de inversión. El total de recursos que se dejarán de ejercer por esos rubros en el estado son de alrededor de 3,000 millones de pesos. En conjunto, en Tamaulipas se dejarán de ejercer alrededor de 5,000 millones de pesos en 2021, esta cantidad representa alrededor de 9 por ciento de presupuesto del estado.
Sin lugar a duda, estos hechos económicos justifican la demanda de revisar el pacto federal por parte de los gobernadores de la Alianza Federalista, al menos en el caso de Tamaulipas, donde el objetivo es la aplicación de una fórmula que permita una distribución más equitativa del presupuesto federal. Usted ¿qué opina?