Washington.- Twitter aseguró que los seguidores del actual presidente Donald Trump, en las cuentas de POTUS y WhiteHouse, no pasarán a la cuenta de la red oficial en el siguiente gobierno de Joe Biden.
Cabe mencionar que con esta medida de Twitter, el futuro presidente de los Estados Unidos, comenzará su cuenta sin seguidores lo que le impedirá llegar a millones de usuarios, tal como lo hizo Trump en su momento.
Sin embargo, no siempre es así, pues en el 2016, la plataforma de redes sociales fue diferente al transferir las cuentas del presidente Trump a las de la administración del ex presidente Barak Obama.
En 2016, el gobierno de Trump absorbió a todos los seguidores de Twitter del presidente Obama en @POTUS y @WhiteHouse, tuiteó el martes Rob Flaherty, director digital de la campaña presidencial de Biden.
Asimismo, las cuentas en Twitter de la primera dama, @FLOTUS, y la del secretario de prensa de la Casa Blanca, @PressSec, iniciaran sin seguidores.
El portavoz de Twitter, Nicholas Pacilio, no confirmó la declaración de Flaherty y dijo que la plataforma de redes sociales todavía está hablando con el equipo de transición de Biden sobre la transferencia de las cuentas, según informó El Finaciero.
Según el equipo de Biden, Twitter deberá enviar una notificación a los usuarios que siguen a @JoeBiden o @KamalaHarris para sugerirles que sigan la cuenta @transition46. Posteriormente, esta cuenta será rebautizada como @whitehouse.
Por otro lado Facebook sí está permitiendo que las cuentas presidenciales, como @POTUS, y sus seguidores sean transferidos a la administración de Biden, informó el grupo de trabajo del electo presidente.
El próximo 20 de enero, Joe Biden tomará posesión de su cargo como Presidente de los Estados Unidos, por lo que el evento tratará de se los más apegado a la tradición, sin embargo, se contará con todas las medida de seguridad.
Aunque Biden juramentará al aire libre, como suele hacerse, y tendrá a su familia y allegados como testigos, no se esperan miles de personas presentes en el evento ni mucho menos largas filas formadas desde la madrugada para ingresar a la explanada oeste del Capitolio, sede del acto, que de todas formas mantendrá un estricto protocolo vigente por décadas.
Yvanna Cancela aseguró que aunque la salud y seguridad del próximo 46 presidente estadounidense, como la de su vicepresidenta, Kamala Harris, y sus familias, serán la prioridad en el acto, tampoco se perderá de vista la tradición de hacer partícipes a los estadounidenses.