En algunos casos por el principio de equidad de género, en otras a consecuencia de los forcejeos, las fórmulas de candidatos originales a las que echaría mano el partido político que gobierna Tamaulipas de cara a los comicios del 6 de julio, han sufrido modificaciones y todo indica que cuando inicie
el registro de los aspirantes y las precampañas no se descartan nuevos reacomodos.
En Tampico, por ejemplo, el diputado Edmundo Marón Manzur, que disputaría la candidatura del PAN a diputado federal por el VIII distrito electoral, se vino abajo y su lugar será ocupado por la di- putada local Rosa María González Azcárraga, a la que se le esfumo el proyecto de reelección. La en- cargada de conservar la curul del 22 distrito porteño del sur será la regidora Nora Gómez González.
La candidatura que hasta la fe- cha sigue firme es la de René Sen- tíes Barrios por el 21 distrito del norte, quien, igual que los men- cionados, se subirán al camión del alcalde Chucho Nader, unos para apoyar la reelección del Presiden- te, otros para llegar a los asientos legislativos estatales.
En donde parece que se les hizo bolas el engrudo fue en Altamira. Cuando todo parecía planchado, se armó el desgarriate. ¿Qué pasó? Se ignora. El favorito para candidato a alcalde, Miguel Gómez Orta, se cayó y es mencionado ahora para diputado federal y el nombre de Ciro Hernández Arteaga aparece entre los probables para la Presi- dencia. Los simpatizantes de uno y otro están confundidos y no tienen idea de cómo se arreglarán las diferencias.
La realidad es que, en medio de la incertidumbre, lo único cierto es que aún no hay nada para nadie y como se han puesto las cosas
a quienes elijan va a resultarles complicado arreglarlas. Quizá una de las pocas aspirantes que podría ayudar resolver las discrepancias y pugnas es la diputada Karla Mar Loredo, de todos los aludidos es la única azul de corazón, institucio- nal a la bandera albiceleste que se la ha jugado con el PAN desde la campaña electoral del Gobernador García Cabeza de Vaca.
En donde no ha habido cambios
y parece que no los habrá es entre los panistas de Madero. La fórmula original será la conformada por el ex alcalde Jaime Turrubiates Solís, que buscara otra vez el gobierno municipal, Carlos Fernández Alta- mirano, la diputación del 20 distri- to y Joaquín Hernández Correa, el escaño federal del VII distrito del Palacio Legislativo de San Lázaro.
En las filas morenistas de la ur- be petrolera el panorama luce sin problemas. El alcalde Adrián Ose- guera, tratará de seguir otros tres años en el Ayuntamiento, igual que el diputado Erasmo González Ro- bledo y la candidatura de diputada local se decidirá entre la Directora de Municipio Saludable, Tatiana Ojeda, o al de Participación Ciu- dadana, Jesús Suarez Mata, lo que indique la equidad de género.
Para el Distrito 19, que abar-
ca el norte de Madero y el sur de Altamira, el que no tiene rival es el ex diputado Claudio De Leija Hinojosa. El aspirante de la 4T, que fue siete años titular de Protección Civil, es ampliamente conocido
en los sectores a los que pretende representar en el Congreso del Estado, ya ha creado 40 Comités de Asesores de la Patria y es uno de los mejor posicionados entre los ciudadanos.
En la zona fronteriza como en las del centro y sur del Estado, por otra parte, las preferencias del Movimiento Regeneración Nacio- nal están creciendo a tal punto que los dirigentes estatales del PAN contemplan la necesidad de otorgar las candidaturas a figuras de mayor peso político que las señaladas hasta la fecha.
Con ese propósito analizan la posibilidad de encomendar al alcal- de de Nuevo Laredo, Enrique Rivas Cuéllar, una candidatura de diputa- do, lo mismo que a la alcaldesa de Reynosa, Maki Ortiz Domínguez, y en ciudad Victoria corre el rumor que asegura que encargarían frenar a los morenos al priista Oscar Alma- raz Smer.
Confían asimismo en que si el Revolucionario Institucional elige
a Enrique Cárdenas del Avellano candidato a diputado federal del 5 distrito electoral, contrarrestaría la campaña de la eventual designación de Felipe Garza Narváez, que ya envió al partido de AMLO la carta en la que manifiesta el interés de participar en la próxima contienda electoral por la misma jurisdicción.
En el sur los panistas esperan que la priista Paloma Guillén Vicente y
el notario público Carlos Pérez Her- nández, los dos probables candida- tos, la primera del PRI y el segundo del Movimiento Ciudadano, a la Presidencia tampiqueña, acapara- rán los votos de los electores que no favorezcan a los contendientes de Acción Nacional y evitarían que las boletas electorales vayan a parar a la cuenta del partido obradorista.
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