Todo es puro meme y risa, hasta que otra tragedia nos enluta el alma.
Un funcionario de cuarta, de la cuarta transformación se hizo tendencia por sus ocurrencias instructivas para las mujeres feministas que buscan modificar el sistema machista que nos rodea. Además, apeló porque confiáramos en el presidente, que
no nos engaña, porque a su modo de ser y parecer, son las propias mujeres las que no le ayudan ni tantito para erradicar el régimen opresor.
Marx Arriaga es el que toma las decisiones respecto a lo que se publica en los libros de texto gratuitos, fue director de bibliotecas públicas y responsable de la estrategia nacional de lectura, y poco antes de empezar la pandemia en un acto público sugirió a las mujeres ir a la biblioteca, leer para que entendieran el feminismo para que “no esperen que su libertad les llegue como un regalo”.
El video del año pasado se hizo viral esta semana y da la pauta de nuevo para analizar el “mansplaining” o la “macho explicación” que los hombres en el poder nos aplican una y otra vez, desde el mismo presidente, hasta los funcionarios que le cuerpean en el gabinete. Y aunque se insiste en normalizar estas expresiones, no debemos dejar de apuntar, que estas deben erradicarse pues son métodos arcaicos que marcan el diálogo misógino y machistas contra las mexicanas.
Para ese hombre, como para muchos otros, las mujeres están en resistencia, enojadas, protestando, rompiendo y pintando monumentos, porque no están instruidas y “necesitan dos cosas, uno, cultura que les dará identidad y dos, educación para un pensamiento crítico” y si quieren ambas deben asistir a la biblioteca pública, esto lo dijo frente a la no primera dama Beatriz Gutierrez quien aplaudió la sentencia, que fue secundada por las demás mujeres presentes en ese acto, excepto por un niña que atenta y estupefacta no aplaudió la ocurrencia, fue la que si entendió el mensaje despótico.
Desde luego que leer nos hace libres, leer nos da alas, si no leemos estamos casi obligadas a creer todo lo que se nos dice, sin contrastes, ni juicios propios. Sin embargo, son ellos, el presidente, su esposa y el encargado de definir los diseños de los libros de textos quienes no comprenden el movimiento feminista actual.
Y son ellos, los del primer gabinete paritario y misógino los que no leen ni los periódicos, ni lo que han escrito muchas mujeres en la historia, la ciencia, la cultura, la educación, no conocen el término jurídico del “feminicidio”, no entienden que es “el pacto patriarcal”, no se enteran del origen de la protesta social, no escuchan los reclamos de las víctimas ni la de su familiares, repelen a las activistas porque no quieren abrir los ojos ni lo oídos ante el triste panorama de muchas mujeres y niñas víctimas de violencia y del sistema que no les da justicia, ni protección.
Prefieren vivir en su ignorancia respecto a los temas de género y no, no están de nuestro lado. Están arraigados en el lado incorrecto de esta historia, montados en su macho, dándonos explicaciones no pedidas.
Este hombre representa el pensamiento retrograda que cultivan todos los de la 4T y es el mismo que mando una convocatoria para ilustrar los nuevos libros de texto, pretendiendo que los diseñadores regalarán sus aportes sin paga alguna.
POR GUADALUPE ESCOBEDO CONDE