CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- A veces el deporte te tiene el destino definido y por más que empieces en otro lugar, tarde o temprano finalizarás en el camino que te corresponde, eso le pasó a Carla Camila Plata Ricardí, destacada deportista y orgullosamente de Ciudad Victoria, que en un inicio se enamoró de la gimnasia, pero su destino era claro: su vida era, es y será el softbol.
La pelota blanda, el bate, el diamante y Camila, eran tal para cual y con el tiempo se empezó a notar. La vida de Camila, ha tenido grandes experiencias, sacrificios, recompensas y sobre todo, triunfos, de esos que hacen que valga la pena todo lo que ha hecho por el deporte. Y como toda historia de éxito, siempre hay un largo camino y este es el de Camila.
¿Como fueron sus inicios?
La gimnasia fue su primer amor, pero recibió una gran ‘decepción’, el gusto le duró literalmente, un día, algo que ella recuerda con gracia, “yo tengo unas primas que practicaron gimnasia, yo un día las acompañé, me llamó la atención. Ese primer día la maestra me pidió hacer un split, pero como estaba gordita, no podía, ni sabía que era, me hizo llorar y ya no volví (entre risas)”, indicó.
Pero todo estaba preparado para que ella y el softbol se juntaran, como si se tratara del hilo rojo del destino, como dicta la leyenda en Japón, “esas mismas primas practicaron más adelante el softbol con el profe Tello, yo tenía 5 años, y pues empecé a ir, pero me la pasaba jugando con la tierra del campo, mis papás se enojaban conmigo, pero el profe Tello, siempre dijo ‘poco a poco le va a agarrar gusto’, esos fueron mis inicios”, manifestó.
¿Cuál fue su proceso?
Y así fue, se enamoró para no romper más el encanto. Tras tomarle gusto al softbol, comenzó a participar en Campeonatos Estatales y Nacionales, creció, se desarrolló deportivamente tras tener experiencias únicas con sus compañeras, prácticamente el softbol se volvió su vida; la Villa Olímpica, era una casa más.
Camila pasó por un proceso de aprendizaje y la hizo de todo; jugó prácticamente en todas las posiciones, incluso de pitcher, pero así como Dios y el destino la tenía preparada para el soft, el home, era su lugar en el que iba a encontrar la felicidad… “yo pasé por todas las posiciones, menos shortstop, recuerdo que a la niña que estaba de catcher en un inicio, ella no le gustaba, un día me dijeron que me pusiera en esa posición… mi brazo, pues… aguantaba los fregadazos (entre risas), me gustó y siempre he dicho que nací para ser catcher, me gusta ser la visión del equipo, el respaldo de mi pitcher y el tener que demostrar liderazgo y confianza como cada una de nosotras del cuadro”, dijo.
¿Tu más grandes logros?
Camila no dudó, sin pensarlo al hacerle esa pregunta, señaló lo conseguido como equipo en Olimpiadas Nacionales y Torneos Nacionales organizados por la Federación en los últimos años; ‘Eres parte junto a todo el equipo, de una generación tamaulipeca referente en el softbol’ se le comentó, ella en su mirada reflejaba la emoción con el simple hecho de pensar en lo que los equipos tamaulipecos han logrado.
“La verdad ha sido todo muy difícil para todas, todas venimos desde cero, pero el trabajo dio sus frutos con nuestros entrenadores, fue un proceso que ha costado mucho, sacrificamos muchas cosas para entrenar, para viajar y jugar, pero vale la pena cuando nos cuelgan cada medalla que conseguimos, cuando se nos reconoce por hacer un buen torneo y cuando equipos de diferentes categorías destacan, me gusta que el softbol victorense y Tamaulipeco destaque”, mencionó la catcher tamaulipeca.
¿Logro individual más destacado?
Como complemento al trabajo grupal, en lo individual inició también a dar de que hablar, pues después de años de participar en Olimpiadas Nacionales, en Nacionales de Federación, decidió realizar la pruebas para formar parte de la Preselección Nacional Juvenil Sub-18 en febrero del 2020.
“Fui a un tryout para visorias, la verdad con lo que hice pensé que no iba a quedar, me había dado por vencida… pero en Culiacán hubo otro tryout a finales de año, después de la pandemia, y mi papá fue quien me animó, me impulsó a que fuera, ‘si la haces está bien, sino lo intentamos’, y tomé su palabra, fui y dí mi esfuerzo, pero no pensaba ni me hacía ilusiones. Después un día en la madrugada recibí una llamada de una compañera de Sonora, ‘¿ya vistes las listas?’, me comentó, yo no había visto nada, y ella fue la que me dijo que había quedado en la preselección, yo pensé que era broma, pero chequé y era verdad”, contó.
“Desperté a mis papás, ellos estaban tan dormidos que yo creo que ni me pusieron atención, brinqué de emoción, no dormí ese día. Soy una afortunada de tener esa oportunidad como preseleccionada y voy a dar lo mejor de mí para seguir con este proceso y luchar por un lugar, sé que esto solo es un pasito, aún no logro nada, pero es algo que vivo con la alegría, disfruto el momento”, pronunció.
Aceptó que ese ha sido uno de sus mejores días de su vida, pues la emoción fue demasiada, “fue algo indescriptible, una emoción enorme, voy a pelear con todo por un lugar, doy gracias a Dios, a mis padres y mi familia por todo el apoyo”, señaló.
“No me ha importado perder por así decirlo, partes de mi vida por ir a entrenar o competir, yo nunca me he querido rendir, he pasado momentos complicados, pero siempre he dicho, ‘tengo que trabajarle duro’ y es lo que siempre me han enseñado a hacer, así que trabajaré y lucharé por todo por ese lugar en la Preselección y por lo que venga”, expresó.
Agradecida…
Es agradecida, con sus entrenadores, padres, amigos, compañeras pero sobre todo con Dios, Camila no olvida a cada una de las personas que la han apoyado y como el destino ha jugador a favor de ella, por lo que sabe que tiene que dar el máximo para dejarlos orgullosos, no solo hoy, sino siempre.
“Primeramente agradezco a Dios, y a mi familia, son mi pilar, mi todo, mi papá Carlos, mi mamá Nazarea, mi abuelita Cuca, mi abuelita Aya, mis hermanos, y mis angeles que están en el cielo, abuelitos José y Chilo. Toda mi familia, siempre están conmigo… mis entrenadores, el profe Tello que empezó a entrenarme y el profe Botello que tampoco me ha dejado sola y no ha dejado que me relaje, a mis amigos por entender que no siempre podré estar y mis compañeras de equipo, al INDE Tamaulipas que siempre nos ha respaldado con el anterior director, Carlos Fernández y ahora con Orlando Martínez y eso nos motiva a seguir adelante, realmente a todos los que han creído en mí y nosotras, a todos agradezco”, mencionó.
¿Como se define Camila?
Alegre y motivadora, son dos de las grandes referencias que se pueden tener de Camila, incluso desde la primera impresión o saludo que tienes con ella, cosa que le ayuda también en el terreno de juego.
“Me defino como una persona que está dispuesta a ayudar a los demás, siempre me gusta apoyar, transmitir confianza, me gusta hablar, ser persona alegre, animar. En el campo cuando vamos perdiendo o no salen las cosas, motivar y siempre agradecida con los que me apoyan”, añadió.
Camila grande a Camila chica…
Si tuviera la oportunidad de viajar al pasado, Camila no dudaría en darle consejos a su yo pequeña, “simplemente no dudes de lo que puedes lograr, no tengas miedo de intentar cosas nuevas, de demostrar quien eres, no tengas miedo de fracasar, nunca desistas y siempre sigue igual de sencilla y humilde”, dijo.
¿Sino era softbol que sería?
Como ya se contó, el softbol y Camila eran tal para cual, pero si este deporte no existiera, Plata Ricardí se vería como deportista de handball. “yo practiqué el deporte de handball en la secundaria, los tres años, me gustaba pero pues no le ganó al softbol (entre risas), creo que ese sería mi otro deporte”, declaró.
Su mas gran inspiración
Los padres siempre serán únicos, un ejemplo, inspiración, y para Camila, ellos siempre serán su más grande referencia a seguir, pues ha sido testigo o por lo menos ha sabido la historia de cada uno de los dos y eso ha hecho que Camila, tomé al Sr. Carlos Plata y la Sra. Nazarea Ricardí, como sus más grandes ejemplos de inspiración.
“Ellos pasaron por cosas muy difíciles para estar hasta donde están, yo quiero devolverles un poco de lo mucho que me han dado, siempre han estado conmigo y les voy a estar agradecidos”.
Carla Camila, seguirá con su sueño intacto, ese gran objetivo que tienen todos que es acudir a unos Juegos Olímpicos, pero primero quiere trascender, aprender y ayudar a que crezca más el deporte que más le apasiona: el softbol.
Por ahora entrena para la concentración de fin de mes con la Preselección Sub-18… sabe que esto aún no es nada, llegarán más cosas que aprender y mejorar, y sin duda, estará lista para cualquier reto que se le presente pues trabajará para intentar lograr sus objetivos… Ella es Camila Plata, valiente, sencilla, alegre, resiliente y sin duda, su vida en el deporte y personal, está destinada a trascender.
POR DANIEL VÁZQUEZ
EXPRESO-LA RAZÓN