Es inevitable enmarcar la elección del 2022 en el contexto nacional que incluye procesos similares en otras cinco entidades.
Dos bloques políticos se disputarán seis gubernaturas.
PAN,PRI y PRD buscarán frenar la conquista territorial de la cuarta transformación, y Morena intentará ahondar su avance en la República Mexicana, un par de años antes de la sucesión presidencial.
Es decir, para la oposición y oficialismo será fundamental cada estado de los que se disputarán: Tamaulipas, Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca y Quintana Roo.
De esos, sólo en Aguascalientes y Durango, PAN y PRI pudieron vencer a Morena en la elección del 6 de junio. Por lo cual, se sitúan como favoritos para el 2022.
Pero entre los muchos factores nacionales que podrían influir en las decisiones que tomen los partidos a finales de este año, está en primer lugar la situación que atraviesen sus dirigencias nacionales.
No tanto en el caso de Morena, donde a final de cuentas la opinión que más pesará será la del presidente.
Pero en Acción Nacional por ejemplo, habría que ver quién ocupa el lugar que dejaría vacante Marko Cortés al frente del Comité Ejecutivo Nacional, si es que no consigue los acuerdos necesarios para reelegirse.
Como principal contrincante tendría al todavía gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez, a quien muchos panistas le han cuestionado su trato más que amable con el presidente López Obrador.
También habrá que ver cómo llega a fin de año Alejandro Moreno, dirigente del PRI, tan castigado en los últimos días por cierto sector del priismo que lo acusa de la debacle tricolor.
El otro gran tema que tendrá repercusiones nacionales es la cuota de género: los partidos políticos y coaliciones estarán obligadas a postular a por lo menos tres candidatas mujeres en el 2022.
Y eso implicará que las dirigencias nacionales y sus comités políticos tomen decisiones basadas desde luego, en las posibilidades que pudieran ofrecer las aspirantes que hayan levantado la mano en las seis entidades.
En Morena por ejemplo, las primeras encuestas internas que han circulado ponen con amplias posibilidades a candidatas mujeres en los estados de Durango y Quintana Roo, donde la alcaldesa de Benito Juárez, Mara Lezama, militante del Partido Verde encabezaría la alianza de la cuarta transformación.
Quedaría en el aire una candidatura femenina.
Mientras que para abanderar una posible alianza PRI-PAN-PRD, hay perfiles femeninos que en el arranque lucen competitivos en estados como Oaxaca, Quintana Roo, Aguascalientes e Hidalgo, donde por ejemplo ven viable la participación como candidata de Carolina Viggiano, actual Secretaria General del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.
En el caso de Tamaulipas parecería que la baraja de cuadros femeninos es más amplia en las filas de Morena, donde podrían competir, al menos en las encuestas internas, mujeres como la senadora Guadalupe Covarrubias; la alcaldesa electa de Nuevo Laredo, Carmen Lilia Canturosas; la diputada federal por Matamoros, Adriana Lozano; y como externas podrían anotarse la presidenta municipal de Reynosa, Maki Ortiz; y hay quien ha mencionado hasta a la ex alcaldesa de Matamoros, Leticia Salazar.
Por Acción Nacional, estaría en la lista la alcaldesa de Victoria, Pilar Gómez Leal, y por el PRI recomiendan no perder de vista a la diputada federal, Mariana Rodríguez Mier y Terán.
Las opciones de uno y otro bando, como se puede ver, son muy distintas. Y eso seguramente formará parte de los cálculos políticos que se tejan en la Ciudad de México.
POR MIGUEL DOMÍNGUEZ FLORES




