Pueblo Viejo.- Además de lidiar con la veda del camarón integrantes de las cooperativas pesqueras del municipio padecen el desplome de la venta del ostión lo que los tiene en situaciones económicas casi dramáticas.
La señora Cándida Gómez González, refirió que su esposo es integrante de la cooperativa 21 de marzo donde la actividad cada vez es menor debido hay que no hay venta de ostión y resulta innecesario que los pescadores salgan a la laguna ya que la cooperativa no les ha podido comprar las arpillas que capturan.
“Mi esposo me comenta que la situación está muy difícil, que si hay producto, pero no hay clientes que compren el ostión y por ello se está haciendo una compra muy limitada de arpillas y se han reducido los trabajos ahorita nada más están yendo de lunes a miércoles a laborar”.
Esta situación mantiene a las familias de los pescadores en complicada situación económica ya que como es conocido también enfrentan la medida de la veda del camarón.
La señora Cándida Gómez indicó que por ello todos en la familia buscan alguna otra alternativa para llevar un ingreso ya sea vendiendo algún producto o en el caso de los varones haciendo trabajos de albañilería, chapoleo o prácticamente lo que le salga siempre y cuando aseguró sean cosas honradas.
Por Vìctor Montiel