ESTADOS UNIDOS.- Especialistas de los temas laborales señalan que las personas que se resisten a vacunarse contra el Covid-19 y que están perdiendo sus trabajos, probablemente no puedan cobrar los beneficios por desempleo, aunque podría haber excepciones, dependiendo de la situación del trabajador y del estado donde se labore, publicó CNBC.
Christopher Moran, socio y abogado laboralista de Troutman Pepper Hamilton Sanders, dijo: “Si no quiere vacunarse, no tiene una exención religiosa o por discapacidad y pierde su trabajo, es probable que no sea elegible para la compensación por desempleo”.
Empresas como Northwell Health, United Airlines, IBM y Kaiser Permanente, están despidiendo o suspendiendo pagos a los trabajadores que se nievan a vacunarse. En todos estos casos, los empleados afectados representan una pequeña parte de la fuerza laboral general de las empresas.
Una encuesta de la Consultora Gartner, señala que el problema podría afectar pronto a muchas más personas, pues cerca del 46% de las organizaciones planean instituir un mandato de vacunación.
También se espera que el Departamento de Trabajo de EE.UU. solicite pronto vacunas o pruebas periódicas de Covid entre las empresas con al menos 100 empleados y la Casa Blanca ya está exigiendo vacunas para todos los trabajadores federales.
Los empleados que son despedidos por negarse a inocularse podrían estar en problemas, dijo Anne Paxton, abogada y directora de políticas del Proyecto de Ley de Desempleo.
Paxton representa a las personas en casos de apelaciones cuando se les niegan los beneficios. Ella señala que los trabajadores califican para beneficios de desempleo en casos de “separación laboral elegible”.
Según la abogada, los estados difieren algo en sus definiciones, pero en la mayoría de los casos, los trabajadores pueden cobrar beneficios después de ser despedidos, dejar un trabajo por “buena causa” o ser despedidos por una razón que no sea “mala conducta”.
Sin embargo, una agencia laboral puede considerar la negativa a cumplir con un mandato de vacuna como “mala conducta”, dijo la especialista. Por lo tanto, perder el trabajo por no vacunarse probablemente descalificaría a un trabajador de los beneficios, con excepciones de que la negativa hubiera sido por razones médicas o religiosas.
De manera similar, renunciar para evitar un mandato probablemente tampoco se consideraría una “buena causa”, apuntó Paxton. “Creo que existe un consenso muy fuerte de que los empleadores tienen el derecho de proteger la seguridad en el lugar de trabajo y los empleados no tienen derecho a negarse a cumplir”.
Sin embargo, hay variables y áreas grises en los estados, por ejemplo un trabajador que recibe una exención del requisito de vacunas por una razón religiosa o médica podría no ser despedido, sino colocado en licencia sin goce de sueldo. Dado que recibieron una exención legítima, una agencia de trabajo podría aprobar un reclamo de beneficios, dijo la experta.
CON INFORMACIÓN DE DIARIO NY