CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Ernestina Pérez Rangel es una mujer de la tercera edad que tiene varios padecimientos como colesterol alto, problemas de circulación y dificultad para caminar, aun así no se rinde ya que tiene a su cargo a una nieta a quien cuida desde que tenía 5 meses .
La madre de la niña que es invidente y muda la abandono, su padre se fue del estado.
Con pasos lentos y con cuidado, ayudados por cables colocados estratégicamente en su domicilio, Flor, como también le llaman, nos recibió en su domicilio localizado en la Colonia Tomás Yarrington, desde dónde pide ayuda a la población en general.
“Enviude hace más de 20 años, y desde entonces vendo ropa usada afueran de mi casa; si vendo 10, 15 o 20 pesos completo para un jugo, las tortillas pero hay veces que no. Si tengo masa, le hago una tortilla a la criatura”.
Ernestina tiene 77 años y Lupita 19; es su nieta a quien quiere como su propia hija ya que la crío desde que media un poco más que una cuarta, al nacer con padecimientos crónicos que no le permiten comer de forma normal.
“A ella la agarré de cinco meses, media una cuarta de grande ella, y desde entonces batallé con ella. Tiene 19 años y va para 20. Su padre está en Durango con otra familia, él está enfermo también, la mamá de mi nieta se fue con otro y me la dejó”
Ernestina platica que con el paso de los años cada vez es más pesada la rutina, ya que su nieta tiene que llevar una dieta especial; no habla, ni ve, por lo que ella tiene que alimentarla, vestirla y llevarla al baño, un trabajo que es muy pesado para una mujer de 77 años.
“Tengo colesterol alto, mala circulación y ahorita me duelen los pies, me arden, no puedo caminar bien. Ella necesita un medicamento de por vida como omeprasol, además pañales para adulto, y comida con una dieta con pollo y verduras”
Por esa razón Doña Ernestina pide ayuda a la población, para sostener a su pequeña familia, afirma que todo es bien recibido, desde pequeñas despensas, pañales para adulto, ropa usada, hasta dinero o medicamento.
POR RAÚL LÓPEZ GARCÍA
EXPRESO-LA RAZON