Con la confirmación de la licencia solicitada por el senador Américo Villarreal Anaya, se completa el grupo de aspirantes a la gubernatura de Tamaulipas que están listos para iniciar sus precampañas.
Américo fue registrado recientemente como precandidato de Morena a la gubernatura del estado, con lo que está en condiciones de realizar actividades contempladas en ese período por las autoridades electorales.
El senador ha trabajado intensamente en las últimas semanas desde que fue designado como el nominado morenista a la gubernatura tamaulipeca, sosteniendo reuniones, dialogando y estableciendo acuerdos con diversos actores que tienen fuerza al interior del partido, en una muy puntual y certera estrategia de operación cicatriz. Consolidar la cohesión es la principal prioridad.
Villarreal también se ha enfocado en la integración de un equipo de trabajo que le apoye en las labores de acercamiento con los grupos y actores morenistas.
En cuanto a los demás contendientes que seguramente tendrá, anote ya a César “Truco” Verástegui Ostos, quien renunció a la Secretaría General de Gobierno el jueves y el mismo día asumió la titularidad de la dependencia Gerardo Peña Flores, quien se desempeñaba como diputado federal.
Aunque desde hace semanas se daba como un hecho que “Truco” se ausentaría de su cargo para dedicarse de lleno a la búsqueda de la candidatura panista al gobierno estatal, fue hasta que pasó el inicio del año cuando se formalizó esta situación y con ello, se confirmó la preparación de que el originario de Xicoténcatl es virtualmente el próximo abanderado azul a la gubernatura, a menos que ocurra algo inesperado de aquí en adelante.
Volviendo a Morena, ayer el propio Américo Villarreal dio a conocer que se presentó ante el pleno del Senado su solicitud de licencia al cargo, la cual ya había tramitado desde hace unas semanas una vez que fue designado por Morena como su representante en Tamaulipas, para iniciar lo que llaman defensa de la cuarta transformación.
Con ellos y Arturo Diez Gutiérrez ya listos, se completa el reducido grupo de quienes serán los aspirantes a la gubernatura, aunque faltan los trámites para sus correspondientes registros ante las autoridades electorales.
Hay quienes aconsejan no perder de vista a la ex alcaldesa panista de Reynosa Maki Ortiz Domínguez, aunque ese caso podría resolverse dentro de poco tiempo una vez que desde los más altos niveles de la llamada Cuarta Transformación tomen cartas en el asunto y se logre que acepte los resultados de un proceso que ella siempre validó.
EL RETO DE PEÑA
Uno de los principales retos a los que se enfrenta a Gerardo Peña Flores como nuevo secretario General de Gobierno no solo es la parte de la operación política con diversos actores de la entidad, para conducir en buenos términos el proceso que culminará con los comicios de junio.
Fundamentalmente, su mayor tarea será la de conseguir que se mantenga el ritmo de trabajo que ya traía César “Truco” Verástegui en la dependencia, como responsable de la estrategia de seguridad y prevención del delito que hizo posible devolver la tranquilidad a miles de familias tamaulipecas en los últimos años.
Conseguir el equilibrio y asegurarse de que siga lo obtenido en materia de seguridad para mantener la gobernabilidad del estado, es quizá la tarea más importante que tendrá Gerardo Peña en su nueva encomienda.
El amigo del gobernador deberá trabajar el doble para que los tamaulipecos y en especial los actores políticos y partidos que contendrán en la elección de junio, no confundan su labor de funcionario público con sus preferencias partidistas en un proceso que será determinante para garantizar o no la continuidad del proyecto personal que encabeza el Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca.
POR TOMÁS BRIONES