TAMAULIPAS.- Otro hallazgo de terror, otro feminicidio, otro asesinato de una mujer que sufrió muchas violencias a lo largo de su vida y que el pasado fin de semana se integró a la estadística de la lista roja de asesinadas, hace un año había posteado su apoyo al 8M con sororidad para todas las víctimas y sus familias y con un dejó de tristeza confesaba su miedo de ser la próxima, y pedía si fuera el caso, ser la última.
Michelle Simón es el nombre que ya circula en las redes feministas que piden justicia ante un caso más que a todas luces se encamina para quedar impune. La espectacularidad de las noticias la ha colocado en portadas y columnas políticas, es una más de las once que fueron atacadas el pasado sábado, una menos que no verá crecer a su hija, ni cristalizados sus sueños de ser cronista deportiva o influencer o personaje público o lo que hubiese querido ser. La violencia feminicida no la dejo ser.
En sus redes sociales y en entrevista televisivas dejó huellas de su corta vida, era de Veracruz y migró a la CDMX, sin cumplir los 30, fue objeto de distintos tipos de violencia de género, madre soltera, luchando sola por la supervivencia de su hija y por ella misma, tras su muerte sufrirá otras violencias, la orfandad de su menor, la institucional y social cuando se le revictimice y la impunidad, porque la justicia en este país avanza lento cuando se trata de crímenes de mujeres. Más de la mitad de los feminicidios no se resuelven.
Los datos oficiales reconocen que apenas un 4 por ciento de los ministerios públicos encargados de atender la violencia contra las mujeres en el país, cuentan con capacitación para resolver estos delitos.
También ese mismo fin de semana se reportó el asesinato de Ana Paula, en Chiapas, madre soltera que se enfrentó a un asaltante y logró salvar la vida de su hijo, fue baleada por una moto y la oportuna foto de su agresor la volvió viral.
Este domingo, la prensa también registro la muerte de Vianey, en Coahuila, tenía 18 años y se arrojó de un taxi en movimiento ante el temor de ser secuestrada, ella iba a su trabajo y nunca volvió.
En Tamaulipas, nos dicen que las mujeres aprendieron ya a defenderse de sus agresores, porque han aumentado un 70 por ciento las denuncias de las mujeres víctimas de maltrato, pero aceptan «que los procesos son lentos y apenas se judicializan de 30 a 40 por ciento de los casos”. Reconocen implícitamente el aumento de las agresiones contra ellas.
Así se retratan las noticias a las mexicanas, mientras ellos posan para una foto en palacio nacional, son empresarios empoderados, otros juegan tenis en Acapulco, otros gritan desde sus curules, otros anuncian una guerra, y muchos machos más se preocupan y solo ocupan de la grilla, la realidad de ellos es muy distinta de la otra mitad de la población, del padrón electoral, las mujeres.
«Con todo menos con miedo» era una frase motivadora de Michelle Simón que buscaba fomentar la práctica deportiva. Sin embargo, no hay tregua, ni estrategia que nos pinte un mejor panorama, las noticias hablan de lo que ya sabemos, que todas vivimos con miedo.
