SAN LUIS.- Civiles armados y policías estatales se enfrentaron a balazos la noche de este martes, en el municipio de Cárdenas, San Luis Potosí.
A través de redes sociales, habitantes de la zona media del estado reportaron tiroteos con duración de varios minutos. En los videos publicados se pueden escuchar ráfagas de más de un minuto.
Extraoficialmente se habla de dos agentes lesionados; sin embargo, hasta el medio día de este miércoles no hay ningún reporte de las autoridades.
En Twitter, usuarios compartieron imágenes de un vehículo particular lleno sangre, en el cual supuestamente viajaban los uniformados. También se puede apreciar la fachada de una casa con más de 100 disparos de arma de fuego.
En el estado potosino, gobernado por Ricardo Gallardo Cardona, las disputas se acentuaron la semana pasada. La madrugada del martes, fuerzas federales fueron emboscadas por un comando armado en la carretera Querétaro-San Luis Potosí.
De acuerdo con los reportes, los presuntos sicarios arribaron a la zona abordo de tres camionetas: una Lincoln gris, una pick up negra y una Pontiac Torrent. La escena recreada por los elementos advierte que los gatilleros estacionaron la camioneta sobre la lateral de la vía y comenzaron a disparar. La información oficial indica que un agente perdió la vida.
Unas horas antes, el pánico se había desatado en Tamazunchale, donde se reportó la llegada de un comando que recorrió las calles principales del municipio.
Sobre los hechos, el gobernador de la entidad explicó que se trató de hombres que sólo pasaban por la región, pero que su destino era Hidalgo y Veracruz.
Al día siguiente, Tamazunchale lució desierto, con negocios y escuelas cerrados a consecuencia de una psicosis desatada por dos ejecuciones ocurridas días antes.
En 2020, la violencia se disparó en San Luis Potosí. Ese año, el 5 de octubre se localizaron 13 cuerpos sin vida en una carretera que va hacia el estado vecino de Zacatecas. Los cadáveres fueron abandonados en un vehículo con un narcomensaje que advertía que eso le pasaría a todos los jaliscas.
Tan sólo dos días después, en Vanegas nueve cadáveres encobijados, maniatados y torturados provocaron el terror.
Por Agencias