Siguiendo las noticias referentes a inflación y de acuerdo a lo publicado en este tema, en la primera quincena de abril del 2022 la tasa de inflación llegó a 7.72%, nivel que no se había visto desde 2001. Y esta situación preocupa gravemente, ya que los precios de los agropecuarios y energéticos han presentado un alza de precios que presionan la economía.
Es importante mencionar que esta situación puede empeorar, puesto que se espera que la tasa de inflación continúe en aumento. Tal es el caso que diversos analistas prevén que los niveles inflacionarios vayan hacía adelante hasta ubicarse en más de 8 por ciento, por tal motivo es muy probable que Banco de México empiece con una política alcista que ubique un incremento de 50 puntos base en la tasa de interés objetivo, lo que puede ubicarla en 7.0%.
Como ya se había mencionado, la inflación afecta directamente el bolsillo del consumidor, puesto que los productos de la canasta básica suben de precio y afecta gravemente el poder adquisitivo que hasta ahora teníamos. No obstante, el poder ejecutivo en la sección por la mañana hacía mención sobre la posibilidad de controlar los precios para no sufrir el alza generalizada de los mismo.
Pero, ¿es posible que exista un control de precios? La respuesta a esta interrogante es no, debido que este tipo de control puede generar distorsión dentro de una economía. Al hablar de distorsión del mercado, se hace referencia a una represión de las leyes de oferta y demanda, lo que significa que las fuerzas del mercado no pueden ajustar los cotos de los bienes y servicios y estos ajustes significan un grave problema a largo plazo.
De forma adicional, un control de precios puede generar contracción en la producción, ya que los productos cuyos precios están fijados no serán atractivos de producir, por lo que se generará escasez de los mismos. Así que tratar de controlar el precio de los productos de la canasta básica no atacaría los problemas de raíz, solo se provocaría una disminución de la oferta cuyas consecuencias serían visibles en el crecimiento económico del país.
Derivado de esta idea en relación con los precios y el anuncio que se llevó a cabo la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) menciona que es posible dialogar y llegar a un acuerdo en el que se encuentre un punto medio que contenga el aumento de los precios de la canasta básica, pero que no es posible establecer un límite de precio a los productos, ya que al final las consecuencias de una decisión como esta solo afectarían en mayor medida a los consumidores.
Por tal motivo, si se llega a un acuerdo intermedio en relación con los precios de los productos de la canasta básica es posible que se establezca bajando el porcentaje de utilidades de los empresarios o mediante subsidios por parte del gobierno. No obstante, sea cual sea la decisión a la que se llegue es muy importante mantenerse al tanto sobre la tasa de inflación en nuestro país, y, sobre todo, establecer estrategias financieras que protejan al bolsillo contra la inflación y los efectos que esta tendrá en la economía mexicana.
Por Angélica González López