VICTORIA, TAM.- Actualmente el contar con un título profesional o laborar bajo el respaldo de este, ya no es sinónimo de contar con un mayor poder adquisitivo con sus respectivos sueldos.
De igual modo todo aquel perteneciente a la clase media con algún tipo de negocio propio qué le genere “buenas” ganancias, pasa por la misma situación.
En Tamaulipas y hasta el primer trimestre de este 2022, se registró qué 1 millón 640 mil 403 habitantes eran personas económicamente activas, según los registros de DataMéxico.org.
Dentro de este universo laboral existen diferentes ocupaciones, desde los asalariados hasta los qué no cuentan con un sueldo seguro o prestaciones de ley.
Un ejemplo de estos últimos, son los limpiaparabrisas, en su mayoría, jóvenes adultos de entre 25 a los 40 años que cuentan con familia y gastos que sobrepasan sus ganancias, las cuales, son de 200 a 250 pesos por día.
Pero para poder generar dicha cantidad, estos trabajadores deben de laborar hasta 10 horas diarias o más sin importar las inclemencias del tiempo.
En el crucero de Cd. Victoria, desde antes de las 7 de la mañana Rogelio y Jacinto deben de estar en dicho sitio para comenzar con su jornada donde aseguran qué de 10 carros qué limpian, la mitad “aunque sean 50 centavos” les dan.
Los dos son el pilar principal qué mantiene a sus respectivas familias y en esta temporada de útiles escolares, deben de trabajar más de lo que ellos establecen para continuar pagando los estudios de sus descendientes y para comer.
Rogelio Pérez Rojas tiene tres hijos, dos de ellos estudian en nivel medio superior y el más pequeño en secundaria.
Cuestionado por Expreso sobre los actuales tiempos de carestia y su falta de certeza laboral, señala que para ellos no existe día de descanso o festivos, pues si un día no trabajan, ese día es pérdida para ellos.
“Trabajo todos los días, ahorita en estos tiempos un día de descanso sería un lujo para uno”.
“Ahorita me administro bien y sin descanso, pues hay que comprar la comida y los útiles, las inscripciones, uniformes, zapatos, todo eso, porque ya mero entran a la escuela los chavos”.
Por su parte Jacinto Catache Flores, quien tiene 14 años laborando en los cruceros, explicó que los 200 o 250 pesos qué gana día a día, ya no es suficiente para sus gastos.
Explicó que hace 14 años cuando inició en esta labor, generar esa ganancia era un verdadero “aliviane”, hoy ya no es así.
Expone que este año para comprar los útiles escolares debe desembolsar hasta mil pesos o más, aparte de las inscripciones, uniformes y zapatos.
Jacinto señala que en estas fechas deberá de gastar hasta más de 3 mil pesos en lo que es el ámbito escolar solamente.
“Nombre, ya 200 pesos no son nada, ya todo esta bien caro y no haces nada”.
“En los puros útiles son como mil pesos, más otros mil de las inscripciones y luego los zapatos y uniformes”.
Aunado a la carestía que afecta su vida diaria, los limpiaparabrisas también sufren por no tener un seguro médico que pague los daños qué puedan recibir en su arriesgada labor en los cruceros más importantes de ma ciudad, donde miles de automóviles pasan en ocasiones sin tener precaución con ellos.
Por Antonio H. Mandujano