TAMAULIPAS.- Morena y el PAN estatal están en plena efervescencia interna en la lucha por ambas dirigencias, en los dos casos se nota la línea de los verdaderos líderes en Tamaulipas y el reto para dichos partidos será mantener la unidad una vez que hayan ungido al dirigente.
Así es mis queridos boes, en Morena Tamaulipas, la dirigencia tendrá sexo femenino, porque fue la decisión nacional, mientras que en el PAN será un masculino, por las mismas causas.
Hay que decirlo, en Morena la cosa se está poniendo tensa, muy tensa luego de que es un secreto a voces que la línea va en favor de LUCERO DEOSDADY MARTÍNEZ LÓPEZ, una mujer relativamente joven, de la zona sur de Tamaulipas, de donde precisamente han comenzado las críticas hacia ella.
La abogada de profesión del sur, tiene en frente a VERÓNICA CASTILLO CARRERA, de Reynosa también abogada, egresada de una universidad privada de Monterrey, será entre ambas que el domingo 90 consejeros guindas, 45 hombres y 45 mujeres escojan a la dirigente.
El caso es que, LUCERO DEOSDADY (no está equivocado así se llama) es vista como la favorita, porque al menos por fotografías publicadas, se acredita su cercanía con la regidora por Tampico MÓNICA VILLARREAL ANAYA.
De hecho, MÓNICA VILLARREAL llegó al ayuntamiento de la mano de la maestra MAGDA PERAZA.
Por eso a LUCERO DEOSDADY ahora que asomó la cabeza ha sido blanco de críticas por parte de un sinnúmero de miembros de Morena que en el sur la tachan de ‘chapulina’ y cosas más feas.
La discusión entre los morenistas donde la mayoría de los mensajes descalifica a LUCERO DEOSDADY fueron acompañadas con fotografías de la favorita para dirigir Morena, pero haciendo campaña para PALOMA GUILLEN.
En el debate de redes, por ejemplo, GASTÓN ARRIAGA LACORTE, uno de los morenistas más movidos del sur y que se opone a la favorita cuestionó que a la base de Morena, que ha luchado los últimos 10 años por consolidar el proyecto que hoy los tiene en el poder no se le haya tomado en cuenta.
Del otro lado, pero ahí mismo en Morena, las versiones sobre VERÓNICA CASTILLO aseguran que a pesar de ser también muy cercana al gobernador electo, en realidad es impulsada por MAKI ORTIZ y su hijo CARLOS PEÑA que cobra como alcalde, mientras su mamá decide.
Por eso arriba señalaba que el reto de PRI y PAN es que una vez que se elija al dirigente, puedan mantener la unidad. En el partido guinda ya todos sabemos que las tribus se pelean y la mayoría de las veces les resulta difícil la reconciliación, eso si, hoy con el gobernador electo como líder creo que será más fácil apaciguar a los encabritados.
Por el lado del PAN la línea fue en favor de LUIS RENE “El Cachorro” CANTÚ, si bien la convocatoria fue abierta, solo el polémico y estridente dirigente (porque líder es otra cosa) y aunque no a todos les gusta, porque se da poco a querer, no hay los aspavientos que amenazan en Morena.
Me explico, si bien es cierto que JOSÉ JULIÁN SACRAMENTO busca victimizarse judicializando el proceso interno, diciendo que no lo dejaron competir, la realidad es que no lo hizo cuando y como debía y su pataleo no llegará a nada.
Los de adentro que lo conocen las que nosotros los mirones, dicen que seguramente buscaba la dirigencia para hacer puente con el gobierno morenista que viene y muy a su estilo ser una oposición a modo, como fue candidato a modo a la gubernatura.
El caso es que en el PAN el que haya una candidatura única, si bien puede ser un signo de imposición, también lo es de liderazgo y en un partido que acaba de perder la gubernatura, el que haya una figura de autoridad que aglutine, que tenga la capacidad de poner, es más a favor que un rasgo negativo.
Ahí en el PAN, por cierto, la regla dice que como hay candidato único no habrá campaña, el día 15 de septiembre se termina el proceso y el 2 de octubre se elige al que se inscribió; es decir a Cachorro.
