Morena/PT y PAN/PRI ya tienen candidatos para la elección extraordinaria por la Senaduría: JOSÉ RAMÓN GÓMEZ LEAL e IMELDA SANMIGUEL, el de Reynosa, ella de Nuevo Laredo, él ex súper delegado, ella ex presidenta de la mesa directiva del Congreso local.
Así es mis queridos boes, de entre estos dos personajes saldrá quien complete los dos años que faltan para que termine el periodo que inició FAUSTINO LÓPEZ, muerto en un accidente carretero.
Para el análisis somero, simplista, Morena pudo haber postulado a una vaca y esta ganaría, porque vienen de ganar la elección de gobernador, la mayoría de los municipios grandes y una mayoría en el Congreso que no pudieron mantener.
Sin embargo, hoy las condiciones electorales en Tamaulipas sin harto distintas a las de la elección del 5 de junio pasado, reitero, muy, muy distintas.
Podría atreverme a decir que la designación de JR como candidato deja más dolor que entusiasmo al interior de Morena y que podría incluso haber más grupos interesados en que pierda al interior de dicho partido, que en el PAN y PRI, donde este proceso es un mero trámite donde no tienen nada que perder.
Me explico: Uno, JR no sueña con ser senador de la República, su sueño, guajiro o no, es ser gobernador de Tamaulipas, sueño que comparten media docena de militantes de Morena que como él tendrían posibilidades de ser candidatos.
Dos, el más entusiasta de los morenos rumbo a la elección de la senaduría de dos años era MARIO LÓPEZ La Borrega, alcalde con licencia de Matamoros. Fue el único personaje de alto nivel en el Estado que se separó del cargo para buscar la nominación.
LÓPEZ, estaba tan seguro de la candidatura, porque presumía de su control electoral de la plaza fronteriza en la que resultó reelecto y donde obtuvo votos al por mayor.
Su incursión en la interna para ser senador de dos años, en realidad tenía como propósito convertirse en el candidato natural para la gubernatura en el 2026 para intentar sustituir a AMÉRICO VILLARREAL.
Por esa misma razón, cumplir su anhelo de gobernar Tamaulipas se alborotó CARLOS CANTUROSAS, recordemos que fue aspirante hace seis años cuando aún militaba en el PAN y fue derrotado al interior por FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA.
Y por la mismísima razón de querer ser gobernador también se anotó ERASMO GONZÁLEZ, el diputado federal por Madero.
Del resto ni vale la pena señalarlos, eran aspirantes menores, gente que se anota para que los vean y en una de esas les ofrezcan alguna chambita que los mantenga pegados a la ubre presupuestal.
El caso es que sería muy inocente pensar que MARIO LÓPEZ, CANTUROSAS y ERASMO le van a poner todos los kilos de su capital político y económico a la candidatura de JR para hacerlo ganar y complicarles aún más el sueño de ser gobernadores en el 2026.
A eso es a lo que me refiero cuando digo que las condiciones políticas y electorales de Tamaulipas no son las mismas del 5 de junio y que por lo tanto Morena no tiene para nada asegurada la Victoria el 19 de febrero del año que entra, día de la elección.
Del otro lado, del de la candidatura de IMELDA SANMIGUEL, hay que decir también que tras la derrota panista en la elección para la gubernatura hay poco entusiasmo, pero es una gran ventaja el que no haya dejado en el camino a grupos o personajes que estuvieran peleando la candidatura.
Ahora le toca a ella y a su dirigente estatal LUIS RENE “Cachorro” CANTÚ y a la dirigencia estatal del PRI (si es que se asume como tal el chavo SOLIS) de convencer a las cabezas regionales de panistas y priistas de que ganar esta elección les significaría mucho más que resucitar de cara al 2024 y luego al 2026.
POR MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA