“La deuda externa y la deuda interna tiene un límite, y ya llegamos al límite”, fueron las palabras de Hugo B. Margáin al dejar la secretaria de hacienda en el sexenio de Luis Echeverria,
a su vez, el entonces presidente contestó que “Las finanzas públicas se manejan desde Los Pinos”. Una similitud con lo que estableció en su renuncia Carlos Urzúa al dejar la secretaria de hacienda. Cuando Margáin dejo su cargo, el gasto público apoyado en deuda siguió de acuerdo con lo requerido por Echeverria con los desastrosos resultados que la mayoría de nosotros conocemos.
Las condiciones del México de 1973 al México actual son muy diferentes, entonces prácticamente las únicas divisas que entraban al país eran las del petróleo y el Banco de México se manejaba de acuerdo con las indicaciones del presidente. Actualmente tenemos instituciones y mecanismos que se han desarrollado para darle estabilidad al país, las divisas llegan principalmente por el TLCAN y las remesas de los connacionales que van a buscar una mejor condición de vida que la que México les puede ofrecer a los EE. UU. y que este año alcanzarán la enorme cifra de 60,000 millones de dólares. El Banco de México tiene autonomía para llevar a cabo su gestión y el dólar no tiene una paridad fija.
Sin embargo, el gobierno ya se acabó los fondos de contingencia, pero existe la presión de algunos rubros del gasto público, entre ellos están las pensiones, y aunque la deuda se ha incrementado de 655,810 MM de dólares que había en 2018 a 792,300 MM de dólares en 2022 y se aumentó su techo de endeudamiento en un 31%, el siguiente gobierno no tendrá suficiente espacio fiscal para evitar crear y/o aumentar impuestos.
El dólar barato ha impactado a las exportaciones haciéndolas menos atractivas y rentables, y el gobierno recibió 156 mil 782 millones menos por la exportación de petróleo. Desafortunadamente el incremento al salario mínimo no tiene el impacto que debiera ya que cerca del 56% de la población económicamente activa se encuentra en la economía informal y reciben el salario que les ofrecen no el que debieran.
En otras variables, en el tema de la seguridad, ha sido el sexenio mas violento del siglo con 159 000 homicidios violentos y 40 000 desaparecidos. En el rubro de la salud el INSABI que debía sustituir al Seguro Popular, no dio resultado lo que ha dejado en el desamparo de la atención médica a los 52 millones de personas que tenían Seguro Popular en 2019 y en 2022 se dejaron de surtir 15 millones de recetas.
La inflación de mayo persiste alta con un valor anualizado de 5.84 y la subyacente subió para alcanzar 7.39% anualizada a pesar de los esfuerzos del Banco de México por disminuirla, seguramente en el segundo semestre tendrá que incrementar nuevamente las tasas de interés. En el caso de la corrupción no se les ha dado una mínima atención, algunos datos; La Escuela de Gobierno y Transformación Pública del Tecnológico de Monterrey reportó que, entre 2019 y 2021, la Fiscalía Especializada en materia de Combate a la Corrupción de la FGR recibió 4566 denuncias, pero obtuvo cero sentencias condenatorias. De los casos de desvíos en Segalmex, el desplome de la Línea 12 del Metro, los presuntos abusos de poder del fiscal Alejandro Gertz Manero, el desvío de recursos en la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), los contratos de medicamentos a empresas del ex superdelegado Carlos Lomelí, los negocios con empresas fantasma en la cooperativa Cruz Azul, inclusive irregularidades dentro del Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado (INDEP), todos quedaron impunes.
Desafortunadamente, en este sexenio también los mexicanos hemos sido divididos por ideologías que nos apartan de la realidad y la posibilidad de que unidos podamos enfrentar los desafíos que tiene el país aprovechando las oportunidades que se presentan como la del near shoring.
Mientras tanto, a cuatro años y medio del actual mandato, se concentra en promocionar a sus potenciales candidatos presidenciales.
POR FRANCISCO DE ASÍS