La vivienda en México ha sido un tema de discusión constante debido a su impacto directo en la calidad de vida de la población. A pesar de los esfuerzos realizados por instituciones como el Infonavit, persisten desafíos significativos que demandan atención.
El déficit habitacional es uno de los problemas más acuciantes en México. Según datos del Infonavit, en 2021, se estimaba que el país tenía un déficit habitacional de más de 9 millones de viviendas. Esto se traduce en familias luchando por acceder a viviendas dignas, lo que afecta su calidad de vida y limita su desarrollo.
El acceso a la vivienda en México está marcado por desigualdades económicas y geográficas. La mayoría de las viviendas financiadas se encuentran en áreas urbanas, lo que deja a las comunidades rurales en una situación desventajosa. Además, las tasas de interés y los requisitos para obtener un crédito hipotecario pueden excluir a sectores de bajos ingresos.
No solo se trata de cantidad, sino también de calidad. Aunque se han hecho avances en términos de construcción de viviendas, persisten problemas relacionados con la infraestructura básica, como agua potable, alcantarillado y electricidad.
El crecimiento urbano descontrolado ha llevado a la proliferación de viviendas en áreas que carecen de servicios y conexiones adecuadas. Esto ha contribuido al fenómeno de las viviendas abandonadas, donde muchas unidades permanecen desocupadas debido a su ubicación inadecuada o la incapacidad de los propietarios para pagar sus créditos.
La problemática de la vivienda en México también tiene un impacto ambiental. Datos del Infonavit resaltan la necesidad de adoptar prácticas de construcción sostenible para reducir la huella ecológica de las viviendas. La falta de enfoque en la sostenibilidad podría agravar los problemas ambientales y limitar la habitabilidad a largo plazo.
A pesar de los esfuerzos realizados por el Infonavit y otras instituciones, la problemática de la vivienda en México persiste. El déficit habitacional, la inequidad en el acceso, la calidad de la vivienda, la urbanización descontrolada y el impacto ambiental son desafíos que requieren atención continua. Abordar estos problemas requiere una combinación de políticas gubernamentales efectivas, inversión en infraestructura y construcción sostenible. La vivienda es un derecho humano fundamental, y resolver esta problemática es esencial para el bienestar y el desarrollo de la sociedad mexicana.
POR MARIO FLORES PEDRAZA
