Vienen tiempos peligrosos para la coalición “Va por México”. Estos días que faltan para que se defina cuál de las dos contendientes llevará la representa- ción del frente opositor en la campaña presidencial, serán decisivas para mantener la cohesión entre tres partidos que poseen perfiles altamente diferenciados y que antiguamente fueron adversarios.
Hoy las circunstancias que vive México los ponen en el mismo lado, defendiendo una misma visión de país.
Sin embargo, unos son los acuerdos cupulares entre los partidos y otra condicionante es la circunstancia que se vive dentro de la militancia partidista de estas tres instituciones políticas.
Circula en redes sociales una fotografía donde están posando para la cámara fotográfica miembros del Foro de Sao Paulo donde se destaca la presencia de Beatriz Paredes, dando con esto un significado negativo a su militan- cia en la izquierda, lo cual ideológicamente genera conflicto para quienes militan en la derecha.
Sin embargo, para fines prácticos es irrelevante que ella crea en la socialdemocracia si su trayectoria política ha sido caracterizada por una visión institucional y hoy la une a sus compañeros de coalición el mismo objetivo.
El mayor peligro en la coalición hoy es el “fuego amigo”.
Es fundamental que se desarrolle una labor institucional por parte de las dirigencias de los tres partidos, y por otra, -en paralelo-, una labor de sensibilización realizada conjuntamente por Xóchitl y Beatriz.
Una operación de integración debería realizarse de modo previo al gran día de la definición, -que es el domingo tres de sep- tiembre-, para que cada una de ellas pida a sus compañeros de partido que sea cual fuere el resultado, -si este fuese adverso a su persona-, apoyen a quien sea designada la candidata de la coalición.
Esa campaña interna dentro de la coali- ción debe apelar a un valor superior que es defender una visión de país, -y frente a este reto-, los intereses partidistas pasan a segundo plano.
Muy significativo sería que Xóchitl y Beatriz, haciendo honor a su vocación democrática, firmaran públicamente un compromiso de apoyarse, -quede quien quede-, y garantizar que ambas seguirán en pie de lucha conjunta- mente a lo largo de la campaña electoral.
De no hacerse esta labor, se corre el riesgo de la disgregación de la militancia y la coalición se reduzca a un membrete de partidos.
CARRETERAS PELIGROSAS
Las carreteras de México se han vuelto inseguras, -no sólo para el transporte de mer- cancías-, sino incluso para la circulación de automovilistas.
Los asaltos a mano armada en varias autopistas se incrementan, incluso de modo colectivo. Pandilleros bajan de los pueblos aledaños para atracar después de haber sem- brado “ponchallantas” sobre el asfalto.
Se conocen las ubicaciones donde se realizan los asaltos y sin embargo, no hay una acción decidida que nos muestre que real- mente hay un comprometido combate contra la delincuencia.
La Guardia Nacional hoy se integra por más de 120 mil elementos fuertemente armados y la mayoría con formación militar. ¿No tienen la capacidad para brindar seguridad a automovi- listas y traileros?
Parece que todo se resume en falta de inte- rés político por erradicar este problema.
KARLA QUINTANA
La renuncia de Karla Quintana, -titular de la “Comisión Nacional Búsqueda de Personas”-, levanta muchas suspicacias pues se sospecha que se le haya pedido su dimisión por negarse a acatar la orden presidencial de revisar el censo nacional de personas desaparecidas, -que hoy rebasa las 100 mil-, con el objetivo de disminuir la cifra y presentar un avance respecto a la desaparición de personas en comparación con los sexenios anteriores.
Vienen los tiempos de maquillajes de fin de sexenio, para exhibir logros.
¿A usted qué le parece?