Un misterio que ha desconcertado a una localidad italiana durante la última década finalmente ha dado un giro inesperado. Adamo Guerra, gerente de una tienda de artículos para el hogar en el centro histórico de Lugo (Italia), desapareció sin dejar rastro en el verano de 2013. Sin embargo, el reciente descubrimiento de su paradero ha dejado a todos boquiabiertos.
La desaparición de Guerra hace exactamente diez años fue precedida por una serie de cartas en las que se despedía de sus seres queridos, incluyendo a sus padres, en las que expresaba su deseo de poner fin a su vida. En una de las cartas, instaba a su familia a cuidar de su exesposa, Raffaella, y sus hijas.
Según recoge el diario italiano Corriere della Sera, las tres cartas afirmaban: «Nunca quise hacerte daño, pero lamentablemente ha llegado el momento de acabar con esto», y continuó diciendo que «había contraído una deuda con gente peligrosa, pero las cosas le fueron mal».
“Vi risparmio il funerale…”: Lasciò tre lettere d’addio, ma dopo 10 anni la moglie scopre che non era morto. “Non è umano, non è un padre…”, il suo commento alla fredda dichiarazione dell’uomo rintracciato in Grecia da “Chi l’ha visto?”.#chilhavisto→https://t.co/gGD1raaeer pic.twitter.com/bXiKZiKA4N
— Chi l'ha visto? (@chilhavistorai3) September 21, 2023
Sin embargo, la semana pasada, Adamo Guerra resurgió de la oscuridad en Grecia, siendo captado por las cámaras del programa Chi l’ha visto? («¿Quién lo ha visto?») de la radiodifustora pública italiana RAI. Sorprendentemente, Guerra no estaba muerto, como se había asumido durante una década, sino que había estado oculto y había cambiado por completo su vida.
«No es un hombre, ni un padre. Ha sido abuelo y ni siquiera lo sabe», dijo su exesposa.
En el momento de su desaparición, los investigadores habían encontrado su automóvil en Ancona y habían rastreado su viaje en ferry hacia Patras (Grecia). Sin embargo, se creía que se había arrojado de la cubierta del barco, lo que llevó a la especulación sobre su destino.
«El abogado me llamó y me dijo que mi marido no era una persona desaparecida», dijo Rafaella al explicar que un tal Adamo Guerra había solicitado en 2022 que se le registrara como ciudadano italiano residente en Grecia y que en un principio pensó que se trataba de un caso de suplantación de identidad.
La reaparición de Guerra ha dejado atónita a su familia, especialmente a su exesposa, Raffaella, quien vio por primera vez a su exmarido en los estudios de la RAI. «No cedí ante la idea de que Adamo estaba muerto, a veces me convencía de ello», comentó Raffaella, visiblemente sorprendida. «Incluso la policía me dijo que siguiera adelante. Pero no creía que un padre fuera capaz de irse», agregó.
Adamo Guerra fue descubierto en una oficina en Grecia y ahora enfrenta la difícil tarea de dar explicaciones sobre su desaparición y reaparición sorpresa. Este giro asombroso en la historia ha dejado perplejos a muchos, incluyendo a los investigadores que habían estado trabajando en el caso durante una década.
CON INFORMACIÓN DE EXCÉLSIOR