Una vez más, el criterio de paridad de género será fundamental en el proceso de selección de candidaturas para las alianzas que competirán en el 2024.
Lejos quedaron aquellos tiempos en que los partidos políticos podían maniobrar para destinar candidaturas femeninas a los municipios mas pequeños, o a los distritos donde estaban destinadas a perder.
Ahora, la ley electoral y la vigilancia del INE, los institutos locales y los tribunales electorales, obligan a las dirigencias partidistas a tomar en serio este criterio.
Así, aunque aún no se ha definido de manera formal, ha trascendido de manera insistente que las primeras posiciones de las candidaturas para el Senado en Tamaulipas corresponderán a mujeres, por el hecho de que en la última elección, fueron encabezadas por hombres.
En el 2018, los candidatos del PAN fueron Ismael García Cabeza de Vaca y María Elena Figueroa Smith, quienes perdieron la contienda contra el ahora gobernador, Américo Villarreal Anaya y la senadora Guadalupe Covarrubias.
En el caso del Senado, la norma electoral dicta que los partidos y alianzas tienen que destinar a mujeres al menos la mitad de las candidaturas de los 32 estados.
Si al final, como todo hace indicar, se incluye a Tamaulipas en la lista de cuota de género, se abre una amplia baraja de perfiles que podrían disputar esas posiciones.
En el caso de Morena y la alianza de la Cuarta Transformación, destacan nombres de funcionarias y ex funcionarias que podrían ser consideradas para el Senado o para otras posiciones.
Para encabezar las candidaturas hacia la Cámara Alta se perfila la posibilidad de Carmen Lilia Canturosas, actual alcaldesa de Nuevo Laredo, que ganó la Presidencia Municipal de esa ciudad para Morena y ha mantenido buenos niveles de aceptación durante su mandato.
Abogada de profesión, ya fue regidora en el Ayuntamiento de su ciudad y diputada local en el Congreso de Tamaulipas. La influencia política de la familia Canturosas en la frontera la sitúan como una aspirante sólida al Senado.
Otra opción que se menciona es la ex alcaldesa de Reynosa, Maki Ortiz, quien ya ha mostrado en más de una ocasión su interés por competir.
La madre del actual presidente municipal de Reynosa buscó ser la candidata morenista en la elección especial que se llevó a cabo tras la muerte del Senador, Faustino López, así como antes se registró como aspirante a la gubernatura de Tamaulipas, en un proceso interno que impugnó aunque al final los tribunales no le dieron la razón. Maki estaría intentando regresar al Senado, cargo que ya ocupó entre el 2012 y el 2016, cuando aún militaba en el Partido Acción Nacional.
En aquella ocasión llegó a la Cámara Alta tras la victoria del PAN en Tamaulipas. Otra posible carta para el Senado es la actual Secretaria del Trabajo, Olga Sosa Ruiz, quien ya fue diputada federal por el Distrito 8 de Tampico, posición que ganó en las urnas en el 2018. Antes había sido diputada local.
En el 2021 pidió licencia a la Cámara de Diputados para competir por la alcaldía de Tampico contra Jesús Nader, en la elección que finalmente le permitió la reelección al actual alcalde del puerto.
Precisamente, en el caso de Olga Sosa también se baraja la posibilidad de que vuelva a su ciudad natal para intentar, por segunda ocasión, convertirse en alcaldesa.
PARIDAD EN TODOS LOS ÁMBITOS
Ahí es donde empiezan a abrirse muchos escenarios posibles. Porque también en el caso de las 43 alcaldías de Tamaulipas, los partidos políticos y alianzas tienen que cumplir con la cuota de género.
En al menos 22 ayuntamientos tienen que destinar la candidatura a una mujer, pero además estos no pueden ser los de menor población, ni aquellos donde dicha alianza o partido haya obtenido los peores resultados en el pasado. Es decir, en al menos la mitad de los municipios grandes las candidatas deben ser mujeres.
El caso de Tampico llama la atención porque ahí suenan con mayor fuerza las aspirantes a la alcaldía. Además de Olga Sosa Ruiz, quien ha desplegado una evidente campaña para posicionarse rumbo a la elección del 2024 es la actual presidenta de la Junta de Coordinación Política y de la Junta de Gobierno del Congreso, Ursula Salazar Mojica. La diputada local ha redoblado su presencia en Tampico por sus aspiraciones a aparecer en la boleta.
La otra opción de la alianza Morena-PT-PVEM es la de la regidora Mónica Villarreal Anaya, quien también puede presumir de contar con presencia y representación territorial en el puerto. En la alianza del Frente Amplio por México la situación es más pareja entre hombres y mujeres.
Los principales aspirantes a la alcaldía de Tampico son la diputada federal Rosa González Azcárraga, el diputado local Mon Marón, y el Secretario de Servicios Públicos, José Schekaibán.
Ahí no habría vuelta de hoja, si la dirigencia nacional del PAN decide que la candidatura de Tampico sea incluida en la cuota de género, la diputada federal, quien ya fue regidora del Ayuntamiento y diputada local, tendría vía libre hacia la boleta.
Un caso similar ocurriría en Victoria, donde entre todos los aspirantes a la alcaldía hay pocas mujeres. Pero en la lista destaca la diputada local del PRI, Alejandra Cárdenas Castillejos, quien ha mostrado interés en competir por la alcaldía de la capital del estado.
El pasado jueves, ofreció en Victoria su segundo informe legislativo en el que emitió un mensaje que se interpretó como un destape: “Con fuerza y corazón le digo hoy a México, a Tamaulipas, a Victoria, estoy lista”.
En el caso del oficialismo, todo hace indicar que el alcalde Eduardo Gattás buscará la reelección, pero hay nombres en las filas del morenismo que podrían ser consideradas para otras posiciones.
Desde que arrancó la actual administración se ha puesto sobre la mesa la posibilidad de poner a competir a la Secretaria de Educación, Lucía Aimé Castillo por alguna posición de elección popular.
Otro nombre que circula en el ambiente político es el de la directora del Instituto de la Juventud, Katalyna Méndez Cepeda, quien encabezó el grupo de jóvenes que respaldó la campaña del actual gobernador, Américo Villarreal Anaya.
MUJERES FRONTERIZAS
Hay más figuras femeninas en el escenario estatal que podrían aparecer en las boletas del 2024, pues son muchas las candidaturas que estarán en juego, y en todos los casos debe respetarse el principio de paridad de género. En el Congreso local por ejemplo, de las 22 diputaciones de mayoría, la mitad deben ser para mujeres, lo mismo que en las listas plurinominales.
Lo mismo en la Cámara de Diputados, donde al menos la mitad de las candidaturas deben ser femeninas. Misma situación ocurrirá en el Senado. Si se cumple la tendencia habitual de los partidos en sus postulaciones las fórmulas estarían integradas por una mujer y por un hombre. En el caso de que la primera posición sea para el género femenino, la ley no les impediría que las dos posiciones fueran para mujeres.
En el caso contrario, si la primera fórmula fuera para el género masculino, la segunda sí tendría que ser una mujer por mandato de la ley. Hasta el momento, no hay un criterio que haya definido si la primera candidatura de Tamaulipas para el Senado corresponde a la cuota de género.
Aunque esto podría ocurrir más adelante si así lo determina el INE; por el momento corresponde a cada partido político definir en cuáles de los 32 estados, serán mujeres las que encabecen las listas de mayoría.
Si la oposición determinara que la candidatura de Tamaulipas corresponde al criterio de paridad de género, el PAN podría considerar otra vez a Imelda Sanmiguel.
Aunque a la diputada local de Nuevo Laredo también se la abrirían otras opciones, como competir por la alcaldía de Nuevo Laredo, o por la diputación federal del Distrito 1 que actualmente está en manos del Partido Verde.
Hay otro perfil en Nuevo Laredo que competiría directamente con Imelda por alguna de esas candidaturas. La ex Secretaria de Bienestar, Yahleel Abdala, quien ya fue candidata a la alcaldía de Nuevo Laredo, en la elección que perdió contra la morenista Carmen Lilia Canturosas. Yahleel también fue ya candidata al Senado en el 2018, cuando militaba en el PRI e hizo equipo con Alejandro Guevara Cobos, quedando en tercer lugar.
En el caso de la competencia por la candidatura del Senado al interior del Frente Amplio, durante las últimas semanas se ha incluido en la conversación a la priista Motserrat Arcos, actual diputada plurinominal.
La maderense, quien ya ocupó cargos de dirección partidista, como la presidencia del Organismo Nacional de Mujeres Priistas, se ha integrado a la lista de aspirantes después de la manera en la que se desarrolló el proceso interno del Frente Amplio, que dejó como finalistas a Beatriz Paredes y a Xóchitl Gálvez, y que otorgó al PRI mucho margen de negociación para reclamar candidaturas importantes en la República Mexicana.
En la frontera, pero por el lado del oficialismo, también ha mostrado su interés en competir por el Senado la diputada local Magaly Deandar, originaria de Reynosa.
Finalmente, en la competencia por las alcaldías fronterizas destaca también el perfil de Lety Salazar, quien se perfila para ser la candidata de la alianza opositora por el Ayuntamiento de Matamoros, donde todo hace indicar, enfrentaría a un hombre.
POR STAFF