Julio César Chávez continúa lidiando con problemas relacionados con las adicciones, pero esta vez su principal preocupación no es su propia batalla contra ellas, sino la de su hijo, Julio César Chávez Jr y es que el icónico campeón mexicano ha expresado su profunda angustia por la lucha de su hijo contra la dependencia de pastillas para adelgazar y teme seriamente por su vida.
La boxeador ha compartido abiertamente la carga emocional que lo agobia debido a la adicción de su hijo, ya que se siente constantemente ocupado tratando de encontrar la manera de ayudarlo y prevenir que su hijo se encamine hacia un destino trágico y es que está convencido de que si no interviene, su hijo podría enfrentar graves consecuencias, incluso llegando a correr el riesgo de perder la vida.
Julio César Chávez teme que su hijo muera de un infarto
En una entrevista en el podcast «Bromeando con los Rivera», Julio César Chávez expresó su pesar en relación a la situación de su hijo, manifestando: «Me da lástima, porque sus hijos son pequeños y no los está disfrutando. Me duele la idea de que pueda volverse loco, que pueda sufrir un accidente manejando a altas horas de la madrugada a toda velocidad, o que pueda sufrir un infarto debido a la cantidad de pastillas que consume».
Es importante destacar que Julio César Chávez Jr. ha enfrentado problemas de adicción a las pastillas para adelgazar en el pasado, lo que lo llevó a alejarse de las redes sociales durante un tiempo, en su regreso, su aspecto físico y emocional había cambiado notablemente y a pesar de que parecía que las cosas estaban mejorando, su padre, Julio César Chávez, tiene serias dudas sobre la efectividad del tratamiento de su hijo.
El «Gran Campeón Mexicano» ha experimentado en carne propia el impacto devastador de las adicciones en el pasado, pero logró superar esa etapa oscura de su vida y transformarla en una experiencia constructiva, con su experiencia decidió abrir algunas clínicas para ayudar a personas que enfrentaban problemas similares. Sin embargo, la impotencia que siente al no poder ayudar a uno de sus propios hijos en su lucha contra las adicciones representa un dolor profundo para Julio César Chávez.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO