En Matamoros hay una guerra abierta entre el alcalde, Mario López Hernández, y el diputado local, Alberto Granados, quien parece el favorito para convertirse en el candidato a la presidencia municipal, toda vez que “La Borrega” no puede aspirar a una nueva reelección.
A menos de siete meses de la jornada electoral, este contexto es el presagio de una tormenta política que podría afectar a Morena en el municipio donde más votos ha obtenido en los últimos dos procesos.
¿Está en riesgo la alcaldía de Matamoros para la 4T? Quizás sea excesivo afirmarlo, pero no puede ser un buen pronóstico el hecho que el alcalde saliente reniegue de manera tan directa del casi seguro candidato a sucederlo.
Apenas hace unos días, el presidente municipal soltó esta frase en un evento público: “Lo único que les voy a pedir, es que no se equivoquen. No vayan a escoger bandidos. Y cuando digo eso, es porque traigo bien claro lo que estoy diciendo. Que no nos enseñen una cara bonita y después nos demos contra la pared, porque la única intención que traen, es venir a saquear a Matamoros. Eso no lo voy a permitir”.
Antes, había confirmado una denuncia de la Junta de Aguas contra la familia Granados por el supuesto robo de agua en un negocio de su propiedad.
En medio de este fuego amigo, el alcalde busca ser considerado para una candidatura en la elección federal, mientras impulsa dos cartas propias para sucederlo: el Secretario de Bienestar Social, Carlos Ballesteros, y el Secretario de Salud, Víctor García Fuentes.
Ambos, hay que decirlo, con muy pocas posibilidades de éxito.
En Reynosa también empieza a cocinarse un conflicto interno, aunque quizás con menos alcances por la talla de los involucrados.
Mientras todo parece planchado para que Carlos Peña Ortiz busque la reelección, cada vez más morenistas levantan la mano y dirigen su metralla contra el presidente municipal.
Por ejemplo, el diputado local, Marco Gallegos, quien aseguró que “Makito” no será candidato y recordó su condición de advenedizo a la 4T.
«Reynosa necesita un cambio, y es la propia ciudadanía quien lo está pidiendo, pues no ven avance, solo ven un gobierno municipal desgastado, que no ha dado resultados”, dijo en la conferencia de prensa en la que se destapó.
Para la competencia interna también está apuntado Luis Miguel Iglesias, actual Coordinador Regional de los Comités de la Cuarta Transformación, aunque con menos estridencia que el legislador.
En ambos casos -Matamoros y Reynosa- asistimos al espectáculo de la feroz lucha por el poder, que tanto ha descalificado el presidente López Obrador.
Pesa a favor de la 4T el hecho de que en la frontera mantiene una ventaja considerable en las preferencias electorales sobre la oposición, lo que le permitiría ganar las presidencias municipales más importantes, pese a la guerra intestina que padece.
Pero a estas alturas, sobra recordar que lo que está en juego en el 2024 es mucho más que refrendar las alcaldías, lo que está en disputa es el futuro político de Morena en Tamaulipas, ni más ni menos que su consolidación, o su declive.
Resultó que coincide con un negocio de agua, una purificadora que todavía estamos invetsigando si esta prestada, si esta rentada, porque no es propiedad de Granados, ellos están haciendo uso de esa propiedad y ahorita la parte jurídica de la JAD están haciendo el encuadramiento de la información para hacer la respectiva denuncia ante la Fiscalía
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Se encontró que no hay permisos de Coepris, no hay permisos de la Junta de Aguas
Se encontró con una tubería clandestina, eso es cosa muy delicada, ya jurídico esta presentando las respectivas denuncias, es un robo, un quebranto al municipio, a las familias matamorenses, es la Junta de Aguas, no es el presidente municipal,
POR MIGUEL DOMÍNGUEZ FLORES
