CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Los niveles de la presa Vicente Guerrero siguen bajando, por lo el jueves amaneció a un 8.9 de su capacidad y el déficit de agua para la ciudad es de casi un 30 por ciento, es un momento crítico para el planeta y también para Ciudad Victoria.
Se espera que con el cambio del fenómeno de la Niña al Niño se registren lluvias abundantes en 2024 y se logren recuperar las presas dijo el alcalde Eduardo Gattás Báez.
Se espera que este año primero Dios, en el que acaba de cambiar del ciclo de la niña al niño, se estima va un periodo con más humedad, con más lluvia, por lo que tiene que llover en 2024.
Dijo que están bajando los niveles de la presa Vicente Guerrero por lo que ayer amaneció al 8.9 por ciento de su capacidad para hacer frente a esa situación, traemos un programa de concientización para la ciudadanía donde pedimos que dejen de hacer muchas cosas que hacíamos normalmente por lo que estamos en un momento critico en el planeta no nada más en Victoria, pero lo estamos sintiendo en Victoria pero esperamos que sea un año de lluvia y nos pueda subir un 50 o 60 por ciento la presa.
Para quienes desperdician el agua hay algún tipo de sanciones ya, pero siento que el ciudadano de Victoria es más consciente de que falta entre un 25 por ciento o casi un 30 por ciento del vital liquido para los ciudadanos.
En sentido vemos que existe mas conciencia no hemos visto personas regando sus jardines con manguera o lavando los carros tirando agua en grandes cantidades lo que significa que la población está ayudando.
Hizo hincapié que en 2024 arrancamos la segunda línea del acueducto, hay que recordar que en el 2001 estuvo la presa Vicente Guerrero al 6 por ciento y ese mismo año por octubre cayo un huracán muy fuerte y subió al 85 por ciento.
Creemos que ya es tiempo que caiga un huracán a la presa por lo que será un año bueno para los victorenses, la segunda línea del acueducto ya es un proyecto del gobernador que ha empujado y conseguido los fondos suficientes para iniciar el proyecto en el 2024.
Por Salvador Valadez C.
EXPRESO-LA RAZON