BAJA CALIFORNIA.- Más de 4 mil migrantes extranjeros y connacionales desplazados por la violencia pasaron su primer año nuevo lejos de sus tierras, en espera de poder cruzar a Estados Unidos, ya sea mediante una cita ante autoridades migratorias o de la mano de los traficantes de indocumentados que buscan los puntos por donde entrar ilegalmente.
De hecho, este año nuevo los recibe con pronósticos adversos, pues la Dirección Municipal de Protección Civil advierte de una tormenta invernal para hoy, con fuertes lluvias, vientos de casi 100 k/h, tormentas eléctricas y caída de nieve, principalmente en las zonas de sierra.
Para algunos, es la primera vez que pasan las fechas decembrinas lejos de sus estados o de sus países, y diariamente esperan ser parte de las 400 personas que hacen fila como parte de las citas otorgadas en la plataforma CBP One.
El delegado del Instituto Nacional de Migración, David Pérez Tejada, informó que los desplazados por la violencia que predomina en estados como Guerrero y Michoacán, se suman a los extranjeros que siguen llegando, principalmente de países como Honduras, El Salvador y Guatemala.
Así, suman más de 10 mil migrantes los que han arribado en las últimas semanas a esta frontera y que se encuentran en contexto de movilidad, pero no sólo la violencia los ha llevado a salir de sus estados de origen, pues ahora se suman los desplazados por el huracán Otis que azotó Guerrero a fines de octubre.
“Éste es nuestro primer año que pasamos lejos de nuestra casa. Por Otis nos quedamos sin nada, sin casa ni trabajo ni nada”, dice Kevin Palacios, de familia dedicada al servicio en restaurantes en Acapulco.
Sus hermanos y su madre se preparan para pasar un invierno con bajas temperaturas a diferencia de su estado natal, por lo que deben prevenir enfermedades respiratorias entre los menores de edad que los acompañan.
“Papa Dios, me la pusiste difícil, pero vamos a guerrear”. Ése el lema con el cual espera poder recibir una cita de la aplicación CBP One para ser admitido en Estados Unidos.
Acostumbrados a climas tropicales, en Tijuana los migrantes enfrentan temperaturas de un solo dígito que los ponen en riesgo, pues corren el riesgo desde una simple gripe hasta neumonía.
Pérez Tejada agregó que si bien los cruces clandestinos en las zonas urbanas están más restringidos, el nuevo polo se ha desplazado hacia el ejido Jacumé en Tecate, donde hasta 800 personas diarias cruzan ilegalmente a Estados Unidos.
También indicó que muchos migrantes llegan con amparo, revelando que sólo en el mes de noviembre se promovieron 10 mil amparos con migrantes que arribaron al estado, mayoritariamente asiáticos y centroamericanos.
En el transcurso del año, según las declaraciones de Pérez Tejada, se registraron migrantes provenientes de al menos 126 países diferentes, evidenciando la diversidad de los flujos migratorios.
CON INFORMACIÓN DE EXCELSIOR