CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Con temperaturas casi congelantes y la inusual caída de aguanieve en algunas partes de Victoria, exponenció la difícil realidad que enfrentan las familias en situación de pobreza extrema, cuyas viviendas con techos de lámina, suelos de tierra y paredes de cartón se convierten en congeladores” que desafían el crudo invierno.
Ubicados en las periferias de la ciudad, en colonias irregulares al pie de la sierra y en comunidades apartadas, esos hogares desafían el frío extremo de forma creativa pero desesperadas.
Paredes atípicas acaban convertidas en témpanos de hielo, huecos cubiertos con cobijas o techos de lámina que apenas protegen del viento gélido son la cotidiana realidad para muchas familias.
En la colonia Amalia G de Castillo Ledón, Leonor Zúñiga Ontiveros enfrenta una situación muy crítica para mantener a su familia abrigada.
Su madre de la tercera edad, su esposo con esquizofrenia y su hija con anemia comparten un hogar donde el frío se siente como si estuvieran a la intemperie.
“Aquí se siente horrible el frío, imagínense los que viven a una cuadra con laminitas en el techo y palitos, viven muy pobres”, refiere Leonor.
La familia busca desesperadamente ayuda con ropa abrigada y cobijas, ya que las que poseen las utilizan para tapar los huecos en su hogar.
Para colaborar, se pueden comunicar al 8345162664 o visitar su domicilio en la colonia Amalia G de Castillo Ledón, número 209, manzana 12, lote 25, entre papaya y Castellanos.
En la colonia Nueva Esperanza, Karla, una habitante más de las más de 10 mil familias en situación de pobreza en Victoria, relata la falta de servicios básicos.
“Aquí no hay luz, no hay agua, ni drenaje, vivimos en casas de madera y lámina donde se sufre el calor de verdad a 40 grados y cuando hace frío es un refrigerador”.
Viven en condiciones inadecuadas para enfrentar el frío, como el calor extremo donde el clima es un factor que a menudo pone en agobios a estas familias.
Aldri Maso, padre de familia y ayudante de albañil, comparte su historia viviendo en condiciones precarias en la sierra.
A pesar de las carencias, afirma ser feliz, pero reconoce las dificultades que enfrenta por no contar con agua corriente, ni drenaje. La escasez de contenedores para almacenar agua suficiente los días que la pipa no pasa, es otro de los problemas que agudiza la situación.
La realidad de esas familias resalta la necesidad de apoyo y conciencia social para enfrentar las condiciones extremas que el invierno impone sobre aquellos que viven en la pobreza más extrema en la ciudad de Victoria.
¿COMO AYUDAR?
Para colaborar, se pueden comunicar al 8345162664 o visitar su domicilio en la colonia Amalia G de Castillo Letón, número 209, manzana 12, lote 25
Por Raúl López García
EXPRESO-LA RAZON