CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Una niña de cuatro años de edad se debate entre la vida y la muerte en el hospital de especialidades, luego de sufrir un severo traumatismo de cráneo, cuando la moto en la que viajaba con sus tíos fue impactada por una camioneta, que los lanzó a varios metros de distancia.
Minutos antes de las 9:00 de la mañana se recibieron varias llamadas al número de emergencias, en las que informaban sobre un fuerte accidente.
El percance ocurrió en Avenida Las Torres y calle Jilguerillos del fraccionamiento Unidos Avanzamos con un saldo de tres personas lesionadas.
Elementos del centro regulador de urgencias médicas, y paramédicos de protección civil del estado, llegaron al lugar encontrándose solo con una pareja a la que le brindaron los primeros auxilios.
De los dos, la mujer fue quien se llevó la peor parte, pues sus lesiones le ameritaron su traslado inmediato a un nosocomio.
De nada sirvió que la joven estuviera inmovilizada en la camilla, pues su esposo al verla que manoteaba a causa de un golpe en la cabeza, optó por quitarle los velcros y llevársela por su cuenta a la clínica del IMSS, donde es reportada como delicada.
Mientras todo esto sucedía, los socorristas se enteraron que antes de su llegada, una niña de 4 años ya había sido trasladada inconsciente hasta el hospital regional de alta especialidad, donde al día de hoy, su vida pende de un hilo.
Tránsito local estableció que tanto la pareja como la niña, viajaban en una motocicleta Italika de color negro ya que iban a dejarla en el kínder, sin llevar ninguno casco protector.
Se desplazaban de sur a norte sobre la avenida Las Torres y al llegar a la calle Jilguerillos, quien manejaba no respeto la señal de alto, ocasionando que fueran impactados por una camioneta tipo Van de la marca Pontiac.
Esta última iba a gran velocidad con preferencia de paso. El impacto fue bastante fuerte, a tal grado que lanzó a los tres tripulantes de la moto a varios metros de distancia, siendo la más grave la pequeña que iba a su kínder.
Los residentes del sector no tardaron en llamar al 911 narrando lo sucedido, y solicitaron el apoyo de ambulancias aunque de poco sirvieron, pues al final todos se fueron en autos particulares.
Por Alejandro Dávila
Expreso – La Razón