Este día se vivirá una elección más en nuestro país y llega con la misma incertidumbre de siempre entre los candidatos: La sombra de la traición.
El triunfo de cada uno de los abanderados a las alcaldías, diputaciones locales y federales dependerán solamente de qué tanta lealtad tengan los integrantes de los equipos, los líderes y la raza con su candidato o candidata.
A nivel nacional la pugna real es entre la corcholata favorita, Claudia Sheinbaum, que representa la continuidad del presidente AMLO, con sus manos, sus deditos y sus canas metidas hasta la cocina de próximo Gobierno Federal.
Con Xóchitl Gálvez , la mujer que valientemente aceptó ser la abanderada del PAN, PRD y PRI, pese a que sabía que tenía muy pocas posibilidades de ganar y que se convirtió en la vocera de muchos empresarios y gente pensando que no está de acuerdo con este Gobierno Federal, que se la han pasado señalando sus errores.
Pero hoy se definirá la película, para conocer el nombre quien será la primer mujer en llegar a la presidencia de la República de México, algo que parecía imposible, será realidad a partir de este año.
Se me olvidaba el tal Maynez, que no fue más que un payaso de rodeo en esta elección, nunca fue una oferta real para cada uno de los electorados, todo mundo supone que su partido Movimiento Ciudadano lo rentó para ser comparsa de Morena en esta elección presidencial.
Hoy se conocerán las encuestas reales, no las pagadas, sino el poder de la gente de ir a las urnas y poder decidir el nombre de su gallo para los cargos públicos.
La campaña fue desgastante, aburrida y hasta muy chafa, se convirtió en una guerra de lavandería, a estas alturas hemos llegado.
Y por su parte, los tampiqueños, maderenses y altamirenses, decidirán a sus alcaldes y Diputados locales como federales, pero también los ronda la sombra de la traición, finalmente el dinero lo compra todo, incluyendo conciencias y hasta
votos.
La contienda del sur de Tamaulipas está muy clara: es entre el PAN y entre Morena, no hay más, el resto de la chiquillada son de relleno.
En la comuna porteña dos mujeres: Rosa González y Mónica Villarreal, son las que están disputando la presidencia municipal, entre ellas está la próxima alcaldesa.
Ambas hicieron una campaña de respeto, sólo en los últimos días se dio un poco de guerra sucia, pero ya fueron en las últimas dos semanas, lo que muestra que uno de los dos equipos andaba desesperado.
La Diputación Local zona sur se la jugarán: Pepe Schekaibán y Sabrina Morales, mientras que la norte: Úrsula Salazar y Marcela Unda, mientras que la Diputación Federal será entre Chucho Nader y Adrián Oseguera.
Y en el municipio de Madero está Erasmo González de Morena y Carlos Fernández del PAN y del PRI, mientras que las Diputaciones locales por los Guindas: Cynthia Jaime, Claudio De Leija y de los panuchos Ivette Quinta y Gustavo González, recuerde que por primera vez esta comuna estará compartiendo al representante de la cámara baja.
En Altamira está Armando Martínez de Morena y Miguel Gómez por el PAN, en las Diputaciones Marcelo Abundis del equipo guinda contra Carlos Toral del equipo azul, y a la Diputación Federal por este distrito: Blanca Narro por Morena y Marcela Orta por los azules.
Los que van para un puesto local tuvieron 45 largos y calurosos días para estar visitando a las familias en sus colonias, reuniéndose con empresarios, el que quiso se metió hasta en la sopa y el papel de las tortillas, para estar exponiendo sus propuestas.
Algunos de los partidos de la chiquillada se la pasaron pateado el bote, unos días encampañados y otros días tirando la chocha, así se la llevaron.
Hoy finalmente lo más importante es que gane el que decida la mayoría, esa es la finalidad de las votaciones, sin hechos de violencia, sin amenazas, ni saldo rojo, todo que sea en santa paz y tranquilidad.
Haga sus apuestas y disfrute de esta jornada electoral histórica para nuestro país, ya que se jugarán 2 mil cargos públicos.
La compra del voto será un operativo que realizarán todos los partidos políticos, pues eso está presupuestado, digo, tanto azules como morenos, ninguno es santo… ¡No, nos hagamos patos¡.
Si vende voto, mínimo véndalo bien, no se lo vaya a fiar y… ahí me habla y me invita una torta René con un litro de agua de jamaica, con mucho hielo.
Por hoy es todo.
Bye…bye.
Recuerde: ¡No se vale chillar!