TAMAULIPAS .- De un pozo que purifica agua del mar naturalmente, son extraídos más de 500 mil litros de agua diariamente para ser repartida entre las familias afectadas por la escasez.
El pozo fue construido hace 50 años en el Ejido la Pedrera en Altamira, tiene una profundidad de 9 metros, en su proceso tuvieron que romper grandes rocas y se localiza a tan solo 4 kilómetros del mar.
En la actualidad, el pozo pertenece a la purificadora El Sauce y a decir de su representante, Ivonne García Ledezma, hay suficiente agua para apoyar a las personas que ya no tienen el suministro en sus hogares.
“Más de 500 mil litros diarios y no es suficiente la ayuda y le pedimos a todos los que tienen que donen, me da mucho gusto que purificadoras se están sumando para apoyar, porque no es justo que las personas vulnerables tengan que padecer la falta de agua, nosotros llevamos 9 años y medio purificando”.
A raíz del agua salada que era suministrada hace dos años en el sur de Tamaulipas, detalló que buscaron otras alternativas para conseguir el vital líquido y fue cuando encontraron el pozo en la Pedrera.
“Empezamos en Tampico y por la crisis de la sal que tuvimos hace dos años y medio, recurrimos a buscar otras alternativas. Muchas purificadoras cerraron, era mucho el gasto y no nos dimos abasto, luego empezó la crisis del agua”.
Ivonne García Ledezma, aseguró que el agua del pozo es la mejor porque viene del mar filtrada naturalmente, “a través del proceso le quitamos ciertos minerales, algunos detalles que tiene”.
“Surtimos a 33 negocios de la región, muchos faros, restaurantes, empresas transportistas y el agua viene bien clara, bien transparente y la ventaja del agua es que viene filtrada y bastante blanca”.
El representante del Comisariado Ejidal de la Pedrera, Marcos Escobedo Ibarra comentó que en la comunidad hay por lo menos seis pozos y el agua se usaba para la agricultura y la ganadería.
“De aquí estamos surtiendo a toda la ciudadanía que alcance. Del pozo se está extrayendo agua las 24 horas y gracias a Dios hemos dado buenos resultados y el ejido siempre ha sido bendecido por los grandes veneros”.
Al pozo le instalaron tres bombas, una de ellas es para la purificadora El Sauce y las otras dos para llenar pipas hasta de 45 mil litros, cuyo llenado tarda unas dos horas.
“Claramente es agua de mar y en las rocas se quedan los residuos, eso le quita la salinidad, es un filtro natural que le quita la sal al agua y en línea recta estamos a unos escasos 4 kilómetros”.
En el Ejido La Pedrera viven un promedio 600 familias y en áreas de la comunidad, fueron construidos diez fraccionamientos.
“Este pozo tiene aproximadamente 50 años y antes solo se usaba para la agricultura y la ganadería, cuando vino el problema de la sal, muchas purificadoras se cambiaron para acá y aquí se establecieron”.
Resaltó Marcos Escobedo Ibarra, que el agua extraída son escurrimientos del mar, es decir no habrá desabasto.
“Hay piedra natural del mismo pozo y mis abuelos fueron escarbando, cuando antes no había purificadoras, de aquí la bebíamos”.
Alrededor del pozo se hacen filas de pipas y unidades del ayuntamiento de Altamira con bidones para ser llenados y las bombas funcionan las 24 horas.
“Tiene una profundidad de nueve metros y para darle una mayor fluidez al agua tuvimos que romper dos metros más de pura piedra, son los grandes filtros”.
Óscar Figueroa
La Razón