CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- En el mes de junio, en el municipio de Madero, se registró la captura de un pez diablo tras las lluvias provocadas por Alberto y el Disturbio Tropical 95L, que dejaron inundaciones severas y especies marinas fuera de sus hábitats.
Asimismo, el 10 de agosto en Llera, un pescador del ejido San Rafael capturó otro ejemplar.
Afortunadamente, según Eduardo Rocha Orozco, vocal de la Comisión de Parques y Biodiversidad en Tamaulipas, esta situación no se ha repetido en el estado. Incluso mencionó que no estaba al tanto de las capturas en Madero y Llera.
Esta especie, que no es nativa de México, ha depredado el ecosistema de muchas otras especies originarias del país al ser introducida de manera forzada. Actualmente, el estado de Tabasco es el más afectado por este problema.
El funcionario estatal informó que no ha recibido reportes recientes de pescadores sobre la presencia del pez diablo, lo que sugiere que la situación está controlada.
Aun así, destacó la importancia de mantenerse alerta ante cualquier caso que pudiera presentarse en las aguas de Tamaulipas.
“Hasta ahora no hemos recibido algún reporte por parte de pescadores, desconocemos la situación actual, pero estaremos atentos para tomar las acciones necesarias”, comentó Rocha Orozco.
En cuanto al avistamiento de osos y jaguares en el altiplano y la biosfera de El Cielo, como ocurrió antes de la llegada de Alberto, Rocha Orozco informó que tampoco han recibido más reportes recientes. No obstante, continúan monitoreando estas especies para controlar su presencia y población.
“En el tema del jaguar, seguimos con el monitoreo. Hace unos días colocamos una jaula en Montecarlo, en la zona de Gómez Farías, y pronto subiremos un comunicado sobre la colaboración que estamos llevando a cabo con la Universidad de Nuevo León para monitorear también al oso aquí en Tamaulipas”, agregó.
Por Antonio H. Mandujano
Expreso-La Razón