No hay duda que los partidos políticos por más pequeños que sean, o deteriorados que estén, siguen siendo un rentable negocio para sus dirigentes, razón por la que unos se aferran a esa minita y otros buscan la manera de también lucrar con las siglas.
Viene a cuento lo anterior porque resulta que, en el Partido Revolucionario Institucional, bueno, lo que queda de ese instituto político, dan señales de que aun respiran y desde el Comité Ejecutivo Nacional hay la instrucción de que se renueven las dirigencias estatales del PRI en todo el país, pero de lejos y de cerca se ve que el objetivo real no es fortalecer al tricolor.
Buena parte de la ciudadanía quizá se pregunte el como para que quiere el PRI renovar sus dirigencias, mejor dicho, quien en su sano juicio querrá ser el dirigente de un partido que está casi muerto, pero créame, no faltan, por diferentes razones y ambiciones, anotados.
Ejemplo, acá en tierras cuerudas, aunque usted no lo crea hay muchos personajes que se anotan para relevar en el cargo a doña MECHE, MERCEDES DEL CARMEN GUILLEN VICENTE, obvio, no es porque realmente les interese trabajar para el partido o porque crean que ellos si pueden hacer que la militancia regrese a las filas del PRI y en las próximas elecciones se ganen más espacios para bien del colectivo.
No, es obvio que quienes buscan la dirigencia del tricolor en Tamaulipas, igual que en la mayoría de los estados donde el PRI perdió el poder, lo hacen porque saben que de una manera u otra hay ganancia para ellos o ellas. Primero, porque andan desqueacerados y como dirigentes, aparte de que tendrán algo que hacer, estarán en el juego político. Segundo, no les han invitado a un proyecto de otro color. Tercero, son ambiciosos, en pocas palabras, traten un interés personal más que de partido.
Aunque las siglas del PRI están desgastadas aun sirven como plataformita para que sus dirigentes sigan en el juego político, aparezcan en los reflectores, y, llegado el momento, hasta ofrecerse como comparsa ya que no saben ser opositores.
Igual pueden servir, quienes asuman la dirigencia de lo que queda del PRI, para hacerse las víctimas, decirse engañados y andarse peleando, aunque sean parte de ellos, con los pocos panistas que quedan o priistas del pasado, o quizá, hasta con algún morenista que se quiera sacar del juego, y obvio, ahí también pueden obtener una ganancia.
Ya está más que demostrado que los priistas para los dobles juegos son buenos, aparte, de que no saben trabajar sin recursos y son excelentes para venderse al mejor postor, nadie puede negar que la mayoría de los tricolores son hábiles, conocen las formas para ofertar sus servicios y aunque el partido siga en decadencia ellos hacer negociaciones y resultar ganadores.
Esa es la razón por la que luego de que el dirigente nacional de los priistas, ALEJANDRO, ALITO, MORENO, sin poquita sensibilidad les anuncio a quienes aún ostentan las dirigencias del PRI en las entidades que habrá movimiento, que se renovaran los comités estatales, y con ello varios personajes se anotan para dirigir el negocio rentable que aún es el partido tricolor.
Claro, eso le sirve hoy más al dueño de la franquicia, ALEJANDRO MORENO, pues el hacer cambios en las dirigencias estatales le permitirá cambiar de discurso, en lugar de fingir cuestionar las Reformas Judiciales o la supremacía de Morena, jalará, como cortinita de humano, los reflectores para hablar de la renovación de SU partido, obvio, no lo hará de gratis, seguro una ganancia obtendrá.
Insistimos, que se tenga movimiento y cambio de dirigencias del tricolor beneficia a los que quieren apropiarse y utilizar las siglas del tricolor para promocionarse u ofertarse en las entidades, pero el más beneficiado es ALEJANDRO MORENO CARDENAS pues le permitirá seguir negociando, lucrando, con lo que queda del partido.
Además, si el PRD se negaba a morir y lo negociaron y ofertaron hasta el final, que no puedan hacer lo mismo con el PRI que de alguna manera tiene un poco más de capital político.
Reiteramos, no hay duda que los partidos políticos por más desgastados que estén siguen siendo negocio para sus dirigentes nacionales, pero igual llevan buena ganancia los de cada Estado. De entrada, aseguran la primera posición plurinominal para una diputación, igual, aunque, en el caso del PRI, no tenga los recursos o prerrogativas que en un tiempo disfruto a placer, si les llega una bolsita de la que puede hacer uso quien se ostente como presidente del partido en la entidad.
Aparte, es la plataformita con la que se pueden promocionar y de paso hasta candidaturas ofertar.
Por lo tanto y aunque se piense que como para que quiere el PRI hacer cambio de dirigencias, lo real es que para los que quieren quedarse con la dirigencia si es un negocio rentable.
POR ROSA ELENA GONZÁLEZ