CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- El gobierno federal y los gobiernos de los estados fronterizos, como Tamaulipas, sostendrán una reunión para analizar la amenaza de deportaciones masivas desde Estados Unidos.
La presidenta, Claudia Sheinbaum confirmó que el próximo martes sostendrá una reunión con las y los Gobernadores de estados fronterizos, con la finalidad de alistar un plan, en caso de que el republicano cumpla con sus amenazas de deportar a los connacionales.
Explicó que el encuentro será en Acapulco, en el marco de la reunión del Consejo Nacional de Seguridad Pública, que sesionará en ese puerto.
«Acordamos, tuvimos Gabinete, y ahí, la Secretaria de Gobernación (dijo que) va a convocar a los Gobernadores de Baja California, de Sonora, de Chihuahua, de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas para poder tener esta reunión en donde nos pongamos de acuerdo cómo recibir a nuestros paisanos y paisanas en caso de que haya una deportación masiva», manifestó.
«Ya lo informaremos, estamos trabajando en ello, hay una parte que tiene que ver con los consulados; otra parte que tiene que ver con el trabajo que tenemos que hacer en México, esperamos que no ocurra, pero si llega a ocurrir, pues estar preparados para recibirles».
En el pasado reciente, Tamaulipas ha recibido intensas oleadas migratorias provenientes desde Centro y Sudamérica, pero también de repatriaciones desde Estados Unidos.
El caso más relevante ocurrió en Matamoros donde se conformó un campamento masivo en el bordo del Río Bravo.
Desde entonces, y gracias al programa de citas para solicitar asilo, se redujo la presencia de migrantes en la frontera de Tamaulipas.
La Presidenta también anunció que pedirán a su futuro homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, que, en caso de deportaciones, su Gobierno envíe a los migrantes directamente a sus países de origen.
La Mandataria federal explicó que actualmente existe un acuerdo con el Presidente Joe Biden para que su Gobierno se haga responsable de repatriar a los viajeros en situación irregular, pero no a territorio mexicano, sino a los países de los que salieron.
«Hay un acuerdo actual con la Administración del Presidente Biden en donde, para muchas de las nacionalidades, ellos directamente los envían vía aérea a sus países de origen. Ahí en donde no tienen una relación directa (EU con algunas naciones) hay un acuerdo también para que contribuyan desde México a enviar a las personas a sus países de origen», indicó.
«Evidentemente, nosotros somos solidarios con todos y con todas, pero nuestra principal función es recibir a las y los mexicanos. Y esperamos tener un acuerdo con la Administración Trump en caso de que haya estas deportaciones, para que ellos también envíen a sus países de origen a las personas que vienen de otros países».
La futura Administración Trump preparó una lista de países a los que podría enviar a los migrantes deportados si sus lugares de origen se niegan a aceptarlos, según publicó NBC News citando a tres fuentes con conocimiento de los temas.
En la lista figuran Islas Turcas y Caicos; Bahamas, Panamá y Granada.
«No hemos recibido ninguna comunicación oficial ni oficiosa sobre dicha propuesta. Además, a la luz del Derecho Internacional, no tenemos obligación de recibir deportados de otras nacionalidades que no sea la panameña», reclamó el Gobierno de Panamá.
Llaman a defender a migrantes
A través de una carta pública, Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) exhortaron al Gobierno mexicano, encabezado por la Presidenta Claudia Sheinbaum, a proteger a los migrantes frente a lo que podría implicar la llegada de Donald Trump al poder en Estados Unidos (EU).
En la misiva emitida ayer, con más de cien firmas de organizaciones y personas defensoras de derechos humanos, se pide a la Presidenta, al Canciller Juan Ramón de la Fuente y a la Secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, que la defensa del Estado mexicano abarque a personas en movilidad humana en ambos lados de la frontera.
En el escrito, señalaron que su preocupación está basada en declaraciones emitidas por Trump durante la campaña electoral y en esta fase de transición sobre medidas que, consideraron, podrían obstaculizar el derecho a solicitar y recibir asilo, incrementar la detención de personas en situación migratoria irregular, aumentar exponencialmente las deportaciones y reducir las vías de migración regular, permisos de residencia y programas de estatus temporal en EU.
Las acciones previstas en materia de migración, advirtieron, podrían generar un escenario «sumamente perjudicial» para las personas en movilidad humana en México como para aquellas de ascendencia mexicana que residen en ese país vecino, si no se implementan acciones concretas en el corto y mediano plazo.
«Por ello, exigimos al Gobierno mexicano que garantice la dignidad y los derechos humanos de estas poblaciones», urgieron.
Esto, propusieron, a través de acciones que estimaron valiosas ante un escenario de deportación y detención masiva, aumento en operativos de control migratorio y eliminación de programas de regularización, como Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés) y Permisos Humanitarios (Parole en inglés).
Algunas de las organizaciones firmantes son Amnistía Internacional, el Bloque Latinoamericano sobre Migración, Borderlands Resource Initiative, el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional, y Human Rights First.
Por Staff
Expreso-La Razón