Los nacimientos son una de las tradiciones más queridas y extendidas durante la época navideña en muchas culturas alrededor del mundo. Estas representaciones, que muestran el nacimiento de Jesucristo, se han convertido en símbolos de la Navidad. A continuación, te decimos cuál es el origen de la tradición de los nacimientos de Navidad en México.
¿Cómo surgieron los nacimientos que ponemos en Navidad?
El origen de los nacimientos que ponemos en Navidad, se remonta a la segunda mitad del Siglo III y el primer cuarto del Siglo IV, que fue cuando importantes teólogos se reunieron para determinar que el día del Christus Dei, sería el 25 de diciembre.
Esta fecha, coincidía con las tradiciones de cultos paganos y celebraciones romanas. Durante el papado de Julio I, la iniciativa de San Cirilo, obispo de Jerusalén, fue cuando se confirmó que esta fecha quedaría como la Navidad.
Los nacimientos, o la costumbre de recrear el nacimiento de Jesús, se hacía como una representación personifica alrededor del pesebre de Belén, como lo relataban en el evangelio de San Lucas (2, 120), data del siglo XIII.
A San Francisco de Asís, en el año 1223, es a quien se le atribuye la primera escenificación en vivo del nacimiento en la cueva de Gre¬ccio, en Umbria, para conmemorar la Natividad de Jessús, y todo con autorización del Papa Honorio III.
Este evento pronto cobró gran importancia, y el nacimiento se extendió al resto de la región que hoy conforma Italia.
Al pasar del tiempo, la escenificación del nacimiento pasó de personas reales a personajes tallados en madera policromada de tamaño natural. Hasta la mitad del siglo XVII, y en especial durante el XVIII, que adquieren gran popularidad en Europa.
Para esos momentos destacan los nacimientos de hechura napolitana, pero es en España donde adquiere el nombre de Belén.
Los nacimientos con figuras de tamaño real se instalaban en iglesias, conventos y palacios, a donde los iban a ver los fieles durante la Navidad, llenos de entusiasmo y devoción.
Rápidamente el pueblo buscó instalar en sus casas los “belenes” (nacimientos), que tuvieran gran parecido con los que se ponían en las iglesias.
Debido a que estos nacimientos eran más personales, devotos y de carácter intimista, y con menos espacio dentro de casa, hizo que las figuras se hicieran de menor tamaño.
A esto, se sumó que se utilizaron una gran variedad de materiales, para elaborar los nacimientos, lo que dio inicio a una tradición artística y artesanal de nacimientos para las casas.
¿Cuándo llegaron los nacimientos de Navidad a México?
Con la llegada de los españoles a lo que sería México, la tradición de los nacimientos viajó a nuestro país, de la mano de las primeras órdenes de religiosos que estarían encargados de la evangelización.
Se tiene el registro de que fue fray Pedro de Gante quien celebró el nacimiento de Jesús hasta el año 1528, con la preparación de cantos y rezos para los indígenas, a quienes hizo venir de diversas regiones.
Con gran rapidez las celebraciones se convirtieron en tradición, que rebasaron al carácter evangelizador. Se estableció la costumbre entre los novohispanos, durante las fiestas de diciembre y que hasta ahora prevalece.
La representación del nacimiento de Jesús, pronto llegó a las manos de los artesanos, que con la riqueza y gran diversidad cultural de México, se alimentó de distintas visiones y materiales, para elaborar los nacimientos.
CON INFORMACIÓN DE EXCÉLSIOR