10 diciembre, 2025

10 diciembre, 2025

Trump: de la Guerra Comercial a la Guerra Fría

TRÓPICO DE CÁNCER / JESÚS COLLADO MARTÍNEZ

El 2 de abril en el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca, el Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump llevó a cabo un acto al que llamó el Día de la Liberación y anunció el cobro de impuestos a los productos de todo el mundo que se venden en Estados Unidos. Están incluidos en la obligación de pagarlos, países de Europa, Asia, Medio Oriente, África y Sudamérica. Sólo quedaron exentos de cumplir con estas tarifas recíprocas los productos incluidos en el Tratado Comercial México-Estados Unidos-Canadá TMEC y se mantienen los aranceles del 25% a acero y aluminio y los de 25% condicionados a limitar la migración ilegal y combatir el trafico de drogas principalmente el fentanilo.
El objetivo primordial de estas medidas económicas del Gobierno de Trump es, de acuerdo con su visión, repatriar los capitales norteamericanos y reactivar la inversión extranjera en Estados Unidos, para reconstruir o recrear su planta productiva industrial y recuperar millones de empleos que migraron hacia China, México y Canadá durante los años de la posguerra fría y el neoliberalismo. Por sus implicaciones, este anuncio es el equivalente a una Declaración de Guerra Mundial Comercial, y un llamado, de la peor manera, a los aliados tradicionales de Estados Unidos, en Europa y en todo el mundo, a realinearse bajo nuevas condiciones en contra de un enemigo común que es la expansión globalista de China, lo que explica por qué se aplicaron tarifas a los países miembros de la Organización Mundial del Comercio OMC, ignorando deliberadamente el cumplimiento de la cláusula de Nación Más Favorecida NMF para los países que la integran.
En este punto hay que recordar que un Tratado de Libre Comercio es un contrato entre dos o más países en los que se acuerda simplificar las reglas para comprar y vender los productos de sus socios comerciales y en el que se puede acordar el pago de impuestos muy bajos o ningún impuesto como en el caso del TMEC. La Organización Mundial del Comercio OMC, surgida en los años 80, tiene como propósito establecer reglas entre los países miembros que le dan un carácter global a los tratados entre países y regiones, y en el que se establecen obligaciones como la cláusula de Nación Más Favorecida NMF, que obliga a las potencias a dar un trato de iguales a los países con una economía de menor tamaño. La OMC trabaja también por la integración no sólo económica sino política, social y cultural de los países miembros para crear regiones afines.
Actualmente China es un miembro muy activo de la Organización Mundial de Comercio y también sus socios en el bloque denominado BRICS integrado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, que forman parte de la OMC y por lo tanto estipulan y reconocen la cláusula de Nación Más Favorecida NMF entre los países contratantes. Las tarifas que unilateralmente ha establecido el gobierno de los Estados Unidos para una buena parte de los países del mundo, incumplen deliberadamente la cláusula de nación más favorecida, y según lo dicho por la señora Ngozi Okonjo-Iweala, Directora General de la Organización Mundial de Comercio, esto tendrá implicaciones sustanciales para el comercio mundial y las perspectivas de crecimiento económico ya que esas medidas, las tarifas o aranceles, podrían provocar en 2025 una contracción general del 1% en el volumen del comercio mundial.
El sábado 5 de abril hubo en Estados Unidos una jornada nacional de protestas contra Donald Trump bajo la consigna Hands Off, algo así como Fuera Manos refiriéndose a los derechos de los norteamericanos y las medidas que ha tomado redimensionando las instituciones y las acciones del gobierno en la economía interna de ese país. Las protestas, llevadas a cabo en más de 1500 ciudades de Estados Unidos contra su gobierno, han servido también para dimensionar el tamaño de la oposición a Trump y su asesor Elon Musk. Agencias noticiosas como la BBC de Londres, CNN de Estados Unidos, y los principales medios norteamericanos como el New York Times, el Washington Post, el Wall Street Journal y USA Today, coinciden en calcular una asistencia promedio de un millón de personas en todo el país.
En resumen, hasta ahora, la guerra económica de Trump, por una parte parece dirigirse socavar el globalismo económico que protagoniza activamente la economía China y la de sus aliados dentro de la OMC, incluyendo la cláusula de Nación Más Favorecida, y por otra parte se inclina a favor del libre mercado regulado por los tratados de libre comercio, en un rediseño que permita el crecimiento económico de los actores económicos y la disposición de recursos de los gobiernos, según su visión, para una mejor distribución social en el seno de cada país contratante. El mundo se encuentra en el umbral de una nueva Guerra Fría en la que Estados Unidos, bajo nuevas condiciones, estaría nuevamente a la cabeza de los países de occidente, frente a la poderosa alianza de países de oriente encabezada por China.

POR JESÚS COLLADO MARTÍNEZ

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