CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- La región centro y norte del estado volvió a pintarse de amarillo y rojo en el semáforo del agua de la Secretaría de Recursos Hidráulicos.
En la actualización más reciente, a los 10 municipios de la frontera que ya estaban en rojo, se suman otros ocho del centro del estado, además 15 están en amarillo, y solo once permanecen en color verde.
Este fin de semana se realizó la Décima Novena Reunión Ordinaria de Seguimiento y Evaluación del Semáforo del Cuidado del Agua, en el Tecnológico de Monterrey, campus Altamira.
Durante la sesión, se presentó un balance hidráulico detallado, que analizó la situación actual de las principales cuencas del estado: Río Bravo, San Fernando, Soto la Marina, Guayalejo-Tamesí y la región del Altiplano.
Como resultado del análisis, los municipios de Altamira, Burgos, Madero, Gómez Farías, Hidalgo, Llera, Mainero, Mante, Soto la Marina, Tampico y Xicoténcatl se ubicaron en color verde, lo que indica condiciones estables en el manejo del agua.
En color amarillo, con un nivel intermedio de alerta, se encuentran: Abasolo, Aldama, Antiguo Morelos, Bustamante, Casas, González, Güémez, Jaumave, Méndez, Miquihuana, Nuevo Morelos, San Fernando, Victoria y Villagrán.
Por otro lado, 18 municipios fueron clasificados en color rojo, lo que señala una situación crítica en cuanto a disponibilidad y manejo del agua: Camargo, Cruillas, Guerrero, Gustavo Díaz Ordaz, Jiménez, Matamoros, Mier, Miguel Alemán, Nuevo Laredo, Ocampo, Padilla, Palmillas, Reynosa, Río Bravo, San Carlos, San Nicolás, Tula y Valle Hermoso.
Raúl Quiroga Álvarez, Secretario de Recursos Hidráulicos exhortó a las autoridades del agua y los usuarios a hacer un uso consciente y responsable del agua, ante los retos que presenta Tamaulipas con relación a la gestión eficiente del agua.
Este fin de semana, volvió a ponerse sobre la mesa el tema del déficit de agua, sobre todo en la frontera por la exigencia de Estados Unidos de que México cumpla con el pago de agua que indica el Tratado de 1944.
El Secretario advirtió que la zona norte registra un grado de «presión hídrica fuerte».
La Cuenca del Río Bravo no cuenta con disponibilidad de líquido y es la que sufre la peor crisis hídrica en el estado que incluso, de sobreexplotarse, pone en riesgo el consumo humano en la región donde habita más del 50 por ciento de la población de Tamaulipas.
También se han limitado los riegos en el Distrito de Riego 025 de por lo menos 200 mil hectáreas de cultivo, a raíz de la grave escasez.
Lo anterior, aunado a que las dos Presas Internacionales La Amistad y Falcón, ubicadas en dicha cuenca, registran su peor nivel luego de qué suman un almacenamiento conjunto de 361 millones de metros cúbicos mientras que el rezago que se tiene con el vecino país del norte asciende a los mil 547 millones de metros cúbicos.
«Hay que recordar que Tamaulipas en la zona norte no genera agua, no tenemos un sólo río tamaulipeco que nazca y muera en el estado», aseveró.
«Vivimos absolutamente a expensas de lo que sucede en la parte alta de la cuenca del Río Bravo».
«Si lo que sucede en la parte alta resulta en un sobreconcesionamiento y una sobreexplotación, como sucede, pues sufrimos la falta de escurrimientos y de disponibilidad de agua», agregó.
Precisó que existe un déficit de más de 900 millones de metros cúbicos de agua en la cuenca del Río Bravo al tomar en cuenta el nivel actual de las Presas la Internacionales Falcón y la Marte R. Gómez.
Este problema de agudiza a pocos meses de que concluya el actual ciclo del Tratado de Aguas de 1944.
El documento binacional establece que México debe aportar un promedio de 431 Mm³ anuales durante cada ciclo de cinco años.
Esta semana, Donald Trump calificó el caso como un «robo» de agua y amenazó a México con aranceles si persiste el incumplimiento con la entrega establecida en el Tratado de Aguas de 1944.
El Presidente recordó que, a mitad de marzo, su Administración había ya negado por primera vez en la historia una solicitud especial del Gobierno mexicano para abrir un canal para entregar agua del Río Colorado a Tijuana en represalia por la demora en la aportación de líquido del Río Bravo.
«Seguiremos intensificando las consecuencias (contra el Gobierno de México), incluyendo aranceles y, tal vez, incluso sanciones, hasta que México cumpla con el Tratado y le dé a Texas el agua que se le debe», dijo Trump en un mensaje en la red social Truth Social.
En su conferencia mañanera, la presidenta Claudia Sheinbaum descartó la imposición de tarifas adicionales y reiteró que hay mesas de trabajo entre autoridades de ambos países, por lo que no ve que el tema vaya a escalar en un conflicto.
-¿Descartaría sanciones como las que amenazó el Presidente Trump?, se le preguntó.
«No, no lo creo (que haya sanciones), es, como sabemos, es la manera también de comunicar del Presidente Trump, pero hay una mesa de trabajo para fortalecer la comunicación, que a lo mejor lo que se había estado trabajando con el Departamento de Estado, pues a lo mejor no lo conocía la Secretaria de Agricultura.
«Entonces nuestra labor, pues es informar a todos de qué se trata, cómo se trata y esperemos pues que se llegue a un buen acuerdo», confió.
Sheinbaum rechazó que el acuerdo firmado hace 81 años deba ser renegociado con Estados Unidos y destacó que el país vecino del norte entrega más recurso hídrico que México.
«No creo que deba negociarse es un tratado justo, el tema es que la CILA, que es la institución que se dedica a revisar este tratado, o a garantizar que se cumpla el tratado, es un tratado que establece que Estados Unidos entrega agua por el Río Colorado y México, entrega agua por el Bravo, es un tratado justo.
«De hecho entrega más Estados Unidos de lo que nosotros entregamos porque así es la cantidad de agua que hay en cada lugar, no es más que eso técnicamente establecido», apuntó.
Por Staff
Expreso-La Razón