CIUDAD VICTORIA, TAM.- En estos días asistimos a una noble exposición titulada : Jóvenes Promesas que convoca el estudio de HE, un espacio donde los jóvenes echan andar sus sueños y el poderío de su imaginación, con una muestra magnifica en el atrio del Centro Cultural Tamaulipas, a la férula de Iliana Martínez que le ha dado entrada a los talentos de Tamaulipas y del norte de México, impulso reflejado en una tarea que poco a poco ha dado resultados en la convocatoria visual por las obras de arte.
Sin duda un acierto de su directora que ha abierto las puertas del bello espacio de acuerdo a la política social del gobernador Américo Villarreal Anaya.
Esta reunión de jóvenes artistas, adolescentes y jóvenes que demuestran la madurez y el aprendizaje de dos excelentes maestros de arte egresados de la Escuela de Artes Visuales de la UANL, y está muestra nos brinda la oportunidad de mirar a cielo abierto el trabajo de estos jóvenes maestros Helena Guzmán y Beto Carrizal y la asimilación plástica en una buena enseñanza de este grupo de muchachas y muchachos que abren sus alas al viento del color y las formas con un empuje impresionante Hemos visto así jovencitas con disposición al dibujo que nos ventilan ya una predilección sobre la gráfica y otras sobre la obra en tela al oleo y al acrílico.
El arte emociona y compartimos la emoción de los padres de estos jóvenes que se muestran en su primera exhibición en un espacio público abierto y decoroso.
Algunas jóvenes me asombran en tanto que sus recuerdos técnicos, de grata enseñanza de sus maestros y los recursos de una imaginación abierta a las visiones del arte de nuestros días He hecho incapie que en el arte hay dos grandes maestros: Los Museo y los Libros, porque un artista de nuestro tiempo recorre como los antiguos maestros la teoría y la práctica.
Un artista de hoy como el de ayer contrae obligaciones de cultura amplia y crítica.Los libros no han muerto porque la imaginación no es solo artificial sino la a práctica de la lectura y nuevas visiones en el espectáculo del arte como práctica y sentimiento humano. Helena Guzmán y Beto Carrizal lo saben bien y sus recursos tecnicos los entregan a sus pupilos, este grupo jóvenes que representan la promesa de nuestro material humano de imaginación.
Sería bueno entender dentro de una sana política cultural cubrir los cuadros de maestros formadores de artistas con profesionales de la talla de Helena Guzmán Renne y Alberto Carrizal, la carencia de formadores profesionales en el arte crean un vacío en la enseñanza artística No contamos por ejemplo con un maestro ceramista, ni un escultor, y menos con un maestro de pintura que nos ofrezca una visión crítica y profesional de las artes visuales .Impera la mediocridad y pobreza intelectual. Personas de la calidad de Helena Guzmán y Beto Carrizal llenan un vacío en la enseñanza de las artes visuales de nuestra ciudad.
POR ALEJANDRO ROSALES LUGO
