Llama la atención la ligereza con la que la empresa Tractebel/Engie ha operado en Tamaulipas, donde las explosiones que se han registrado en redes operadas por ellos, han causado la muerte de al menos tres personas.
El asunto es tan delicado que los tres niveles de gobierno han puesto la lupa sobre esta compañía de origen francés, que ofrece el servicio de Gas Natural en las ciudades de Matamoros, Reynosa y la zona conurbada.
Hace poco, la presidenta Claudia Sheinbaum hizo un llamado para que la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente investigue el funcionamiento de la empresa.
“Revisamos los casos y hablamos con las víctimas para conocer el tema”, declaró la mandataria, tras ser cuestionada sobre los accidentes registrados en varios estados, particularmente en Tamaulipas, donde la empresa francesa es la única proveedora de gas natural.
En Tamaulipas se han documentado al menos cuatro incidentes graves vinculados a sus instalaciones, los cuales han provocado la muerte de tres personas y lesiones a otras tres.
El primer caso ocurrió en enero de 2022 en Matamoros. Una explosión dentro de un Seven Eleven dejó como saldo la muerte de dos jóvenes.
Posteriormente, el 28 de junio de 2023, una fuga de gas provocó una explosión en un departamento ubicado en Matamoros, donde resultó gravemente herida Thalía Martínez.
En ambos casos, la empresa intentó deslindarse.
Un año más tarde, el 10 de octubre de 2024, en el fraccionamiento Miramápolis, en Ciudad Madero, se registró una nueva fuga en una válvula. El gas acumulado provocó un incendio que alcanzó varias viviendas, vehículos y un establecimiento de alimentos. En este evento resultaron lesionadas tres personas: Ana Belén, de 25 años, quien murió días después en el hospital del IMSS, así como Jonathan Daniel, de 45 años, y Clemente, quien atendía una taquería.
Más recientemente, en mayo de 2025, se reportó otra fuga de gas en la misma colonia Miramápolis. El incidente obligó a evacuar a estudiantes y personal de tres planteles educativos cercanos, como medida preventiva.
En medio de esta ola de explosiones, la empresa fue multada por la ASEA con 8 millones de pesos.
La razón: haber instalado y operado una red de 280 kilómetros de tubería de gas en el sur de Tamaulipas sin contar con los permisos ambientales.
La falta fue grave pero no procedió la clausura definitiva y la suspensión de su servicio porque eso habría puesto en riesgo la red de distribución, y sobre todo había dejado sin suministro a miles de hogares en Tampico, Madero y Altamira.
Esta conducta de Tractebel/Engie retrata el poco respeto que ha mostrado la empresa por el medio ambiente y la seguridad de los habitantes de la región.
Por. Miguel Domínguez Flores
