MANTE, TAMAULIPAS.- «Mientras algunos pacientes que luchan con el cáncer han logrado salir adelante, otros apenas inician. Y eso es muestra de que la enfermedad, no da tregua y no descansa», menciona Selene Porras fundadora de asociación Mi Gryz.
Con 30 pacientes que tiene registrados en su asociación, a quienes ayuda en trámites para su tratamiento o gastos de traslados o medicina, señala que el cáncer es una enfernedad contra la que muchos pacientes luchan, pero no se erradica.
“Tengo pacientes que han logrado mejorar en su tratamiento y que ya están solo en vigilancia, pero desafortunadamente unos fallecen y otros llegan para iniciar su tratamiento y calvario en la lucha contra la enfermedad».
Con 23 mujeres, 2 hombres y 5 niños en la lista de apoyo de Asociación Mi Gryz, afirma que afortunadamente ya no enfrentan la falta de tratamiento o medicinas en el sector salud, su lucha es contra los gastos que la enfermedad genera al paciente y a la familia.
» Afortunadamente en los hospitales ya no tenemos ese problema de falta de atención en tratamiento o quimioterapias, la necesidad de ayuda y por la cual se acercan a nosotros como asociación, es porque necesitan recursos para el pasaje , hospedaje o incluso les apoyamos con nuestros benefactores con alguna despensa u otros artículos, porque son gente que no puede trabajar o no cuentan con recursos».
Dijo que ante la demanda que existe, se ha visto en la necesidad de pedir a sus pacientes que ya están más avanzados en la recuperación y solo están en vigilancia, le dejen el espacio libre para apoyar a otras que van iniciando.
» No hay tregua, unas van saliendo y otras llegan. Justo acaban de llegar 5 nuevas y por eso pedí a quienes ya tenemos años apoyando y solo están en vigilancia nos den ese espacio para apoyar a las que inician porque si es un proceso largo y requieren orientación y ayuda» comenta.
Selene Porras señala incluso que son las mujeres las que más enferman de cáncer y con las 5 nuevas, se queda en apoyo de 15 porque al menos 10 ya están saliendo de la crisis y se quedan en vigilancia en espera de que su oncólogo les dé de alta. Mientras que en el caso de niños y hombres la cifra de pacientes se ha mantenido estable.
POR PATRICIA PÉREZ CRUZ
EXPRESO-LA RAZÓN




