Ya sea que se trate de recorrer largas distancias por autopista o de enfrentarse al tráfico diario en la ciudad, el gasto en gasolina representa una parte importante del presupuesto mensual. Por eso, cada gota cuenta. Desde el tipo de conducción hasta el mantenimiento del vehículo, pequeños ajustes pueden traducirse en un ahorro considerable al final del mes. Adoptar una conducción más inteligente es clave para enfrentar la volatilidad de los precios del combustible.
Entre las recomendaciones de los expertos destacan prácticas como mantener una velocidad constante en carretera, evitar acelerones innecesarios, revisar la presión de los neumáticos y hacer afinaciones periódicas al motor. Además, planificar rutas para evitar congestionamientos y utilizar aplicaciones que ayuden a encontrar gasolineras con mejores precios puede representar una ventaja adicional. Estas técnicas, cuando se aplican de forma constante, pueden mejorar el rendimiento del vehículo y reducir hasta un 20% el consumo de gasolina.

LAS RECOMENDACIONES DE UN EXPERTO PARA AHORRAR GASOLINA
Wayne Gerdes, un reconocido especialista en eficiencia al volante, ofrece una serie de recomendaciones prácticas que cualquier conductor puede aplicar, incluso sin conocimientos técnicos ni afición especial por los autos. Su enfoque va más allá de los consejos tradicionales, y se basa en una técnica conocida como hypermiling, cuyo objetivo es reducir al máximo el uso de combustible mediante una conducción más consciente y eficiente.
Esta práctica, cada vez más popular entre quienes buscan ahorrar, se centra en ajustar ciertos hábitos al manejar para mejorar el rendimiento del vehículo. Aunque algunas técnicas pueden parecer poco convencionales o requerir ajustes específicos en el coche, Gerdes insiste en que con simples cambios en la forma de conducir se pueden obtener resultados sorprendentes a largo plazo.
Inicio suave: la clave está en la paciencia: Un error frecuente entre los automovilistas es acelerar de manera agresiva al comenzar a conducir. Esto obliga al motor a trabajar más y, en consecuencia, consumir más gasolina. Gerdes sugiere comenzar a andar de forma paulatina, permitiendo que el vehículo gane velocidad poco a poco. Es como mover algo pesado: si lo empujamos con fuerza desde el principio, gastamos más energía que si empezamos con movimientos suaves.
Velocidad estable: menor esfuerzo, mayor ahorro: Conservar una velocidad pareja durante el trayecto es esencial para reducir el consumo. Los cambios bruscos de velocidad, al frenar y acelerar constantemente, incrementan el esfuerzo del motor y, por lo tanto, el gasto de combustible. Una comparación útil que ofrece Gerdes es imaginarse conduciendo sobre hielo, donde lo ideal es deslizarse sin interrupciones. El uso del control de velocidad en carretera puede ser una gran ayuda para mantener ese ritmo constante.
Adelantarse a los frenos: leer el camino con anticipación: Frenar de forma repentina no solo gasta más gasolina, sino que también desgasta componentes del auto. Por eso, anticiparse a los obstáculos o paradas es fundamental. Gerdes recomienda levantar el pie del acelerador con tiempo, permitiendo que el vehículo pierda velocidad de manera natural. Al observar el flujo del tráfico, las señales y los semáforos desde lejos, se logra una conducción más fluida. Es como si el coche fuera una bola rodando: es mejor dejar que se detenga gradualmente que frenarla de golpe.
Usar la inercia: dejar que el auto trabaje por sí solo: Cuando el automóvil ya está en movimiento, posee una energía que se puede aprovechar para seguir avanzando sin gastar más. Gerdes aconseja mantener la velocidad en descensos y utilizar ese impulso para enfrentar subidas sin necesidad de acelerar bruscamente. Esto permite que el vehículo “trabaje solo” en ciertos tramos, lo que se traduce en un menor consumo de gasolina.
Pequeños cambios, grandes resultados: Aunque el hypermiling suena como una técnica para expertos, los consejos de Gerdes demuestran que no se necesita ser un profesional para ahorrar combustible. Cambiar algunos hábitos al volante, como acelerar con suavidad, mantener una velocidad estable o anticipar paradas, puede generar un ahorro significativo en cada tanque lleno.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO




