WASHINGTON, DC.- El gobierno de Estados Unidos pagó 80 millones de dólares a dos sicólogos militares que desarrollaron los programas de tortura utilizados por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en contra de prisioneros sospechosos de terrorismo.
James Mitchell y Bruce Jessen, ex sicólogos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, fueron identificados por la prensa como los autores intelectuales de las llamadas “técnicas de interrogación mejorada” que incluyen ahogamiento simulado, privación del sueño o rehidratación anal, entre otras.
El reporte del Comité Selecto de Inteligencia del Senado que investigó el Programa de Detención e Interrogación de la CIA, dado a conocer la víspera, menciona a Mitchell y Jessen bajo el pseudónimo de Grayson Swigert y Hammond Dunbar.
Swigert y Dunbar desarrollaron el programa de técnicas de interrogación mejorada en contraposición al programa Sobrevivencia, Evasión, Resistencia y Escape (SERE) que forma parte del entrenamiento al que se someten algunos militares estadunidenses.
El SERE ofrece a los soldados estadunidenses técnicas de sobrevivencia ante la eventualidad de ser prisioneros de guerra.
Según el reporte, Swigert describió 12 técnicas similares a las aplicadas por SERE para ser usadas en sospechosos de terrorismo incluyendo abofetear, confinamiento múltiple, permanecer de pie, uso de pañales, insectos y entierro simulado.
Michael Hyden, ex director de la CIA de 2004 al 2006, ha defendido el uso de esas formas de tortura como legales porque se han aplicado a los militares estadunidenses también.