Cuando todo parece listo para el arranque de las campañas electorales, al interior del PRI no luce aún el habitual entusiasmo que adelanta la certeza de que el 7 de junio el ex invencible se repondrá de la debacle política del 2012.
De dientes para afuera todos los representantes del tricolor hablan de que la recuperación de las plazas legislativas que le ganó el PAN hace tres años es un hecho, sin embargo, da la impresión de que la elección de los precandidatos a diputado federal de mayoría, no ha prendido a las bases.
¿Será acaso porque, a excepción de Esdras Romero Vega, quien, debido a su función de alcalde ha establecido una estrecha relación con los priístas de la urbe petrolera, Yahleel Abdalá, María Esther Camargo Félix, Edgardo Melhem Salinas, Miguel González Salum, Alejandro Guevara Cobos y Mercedes del Carmen Guillén Vicente, están desvinculados en mayor o menor grado de la militancia de los distritos electorales a los que aspiran a representar?
O quizá porque sienten que ni siquiera tomaron en cuenta a sus dirigentes estatales a la hora de elegir a los contendientes.
No tenemos idea, aunque hay algunos militantes que de plano advierten que sí fue el alto mando nacional del partido el que impuso a los candidatos, sin tomar en cuenta a los priístas tamaulipecos, entonces que César Camacho Solís y compañía envíen a sus operadores a sacar el triunfo.
Si ellos los escogieron, entonces que ellos los saquen adelante, que casi susurran algunos de ellos, como para que no los escuchen.
¿Qué pesará más a la hora de las votaciones, la disciplina, el amor a la camiseta, las prebendas, la convicción partidista y el deseo de que triunfe su partido en el que militan o el sentimiento de haber sido ninguneados?
Los jerarcas y estrategas están convencidos de que será lo primero, así como la fuerza de la estructura y de los recursos económicos los que decidirán el destino de la competencia política.
Para atenuar la distancia y el alejamiento de los elegidos con los miembros y simpatizantes del partido, el CEN obligó a los precandidatos a entregar una documentación complementaria, como la obtención de las firmas de un porcentaje representativo de los integrantes de los sectores y organizaciones y de la estructura territorial, entre otros requisitos.
Precisamente ayer, el órgano auxiliar de la Comisión Nacional de Procesos Internos les entregó a los precandidatos de dedazo la constancia de que cumplieron con la exigencia señalada por la convocatoria y están listos para acudir ante la representación del INE a formalizar sus candidaturas.
Romero Vega, por cierto, que entregó asimismo al organismo, además de 13 mil firmas de apoyo, su programa de trabajo, éste ajustado a la plataforma electoral del PRI, asistió acompañado de los dirigentes priístas de Madero, Felipe Jiménez Martínez; de Altamira, Eulogio Sánchez de la Rosa; y de Aldama, Arturo Hernández De León, igual que del precandidato suplente Esteban De la Portilla Flores y el dirigente municipal de la CNOP, Adrián Cruz Martínez.
De lo que no se ha dicho nada es de las pruebas toxicológicas y el resultado de la investigación de los recursos personales, que se haría a los candidatos para evitar una posible relación con actividades ilícitas, por lo que se deduce que todos salieron limpios y no correrán ningún riesgo de que en plena campaña los vayan a exhibir ante la opinión pública a causa de ese tipo de irregularidades.
Tampoco se sabe quién será el sustituto de Daniel Sampayo Sánchez al que el Revolucionario Institucional encomendará pelear la plaza correspondiente al IV distrito electoral con cabecera en el puerto de Matamoros, señal de que ya no luce tan seguro, como semanas atrás, la postulación del gerente de la Comapa, Jesús De la Garza Díaz del Guante.
Y es que debe de resultar difícil aceptar una candidatura como esa cuando de antemano el elegido sabe que será enviado al sacrificio o que las posibilidades de salir victorioso son remotas.
A nadie le gusta salir a perder.
Hablando de otras cosas, el Gerente General de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de la Zona Conurbada, Francisco Bolado Laurents, está tomando las providencias para que a la brevedad posible se reparen las filtraciones que sufren algunos de los diques del sistema lagunario del río Tamesí, a efecto de evitar el desperdicio del agua y garantizar plenamente al abasto del líquido a la población y a la industria durante el próximo estiaje.
Al mismo tiempo el funcionario continúa con la revisión de la red de tubería para detectar los puntos vulnerables y tomar medidas para prevenir posibles rupturas y la suspensión del servicio a los usuarios.
