1.-Las tres principales fuerzas en la Cámara de Diputados sorprendieron a la República con el anuncio de que ¡por fin! se habían puesto de acuerdo sobre aspectos fundamentales de lo que ostentosamente llaman “Sistema Nacional Anticorrupción”, y lo celebraron como si en verdad hubieran terminado con esta vergüenza, cuando apenas es el inicio de otra larga lucha social por erradicar el problema enquistado durante décadas a la sombra de la impunidad. En este sentido es de creer que los presuntos acuerdos más bien tienen que ver con el proceso electoral que se avecina, toda vez que resultados, lo que se llama resultados, difícilmente se verán a corto plazo, si es que alguna vez se ven si no pssss no. Como en otros asuntos de singular interés para la sublime patria, se trata de ganar tiempo y sobre todo ganar algo de confianza para sumar votos. Después ya veremos, por lo pronto PRI, PAN y PRD aparentan responder a los reclamos contra los abusos del poder con distracciones como que el Senado ratifique el nombramiento del Secretario de la Función Pública, que los delitos en el ejercicio público prescriban a los siete años o que la Auditoría Superior revise la aplicación de los recursos federales en los estados, cuando lo mero bueno está en otra parte. ¡Pamplinas! Que algunos políticos siguen creyendo que los mexicanos somos tontos de ahora. Por supuesto que esto va encausado al “borrón y cuenta nueva”, pero ojo, que tal vez el respetable no lo soportaría.
2.-Mientras tanto, por tercera persona sabemos que el Papa frece disculpas por las ofensas a México. El embajador Mariano Palacios Alcocer asegura que la Santa Sede de ninguna manera quiso estigmatizar a la República y que las palabras emitidas por Francisco a un amigo “fueron malinterpretadas”, lo dice el funcionario mexicano, pero no El Vaticano. De manera que la duda persiste y el santo deseo de que Argentina “no se mexicanice” subsiste. O Sea que quedamos como al principio, incluido el berrinche del supremo gobierno que en este caso le saltó la liebre por donde menos imaginaba. Ahora se comprende el porqué Francisco no tiene la menor intención de visitar nuestro país, a pesar de que en septiembre andará por tierras gringas. En este sentido recordéis que la familia presidencial ha hecho la respectiva invitación y sin embargo, sólo el silencio responde, o sea que de la ansiada visita no hay nada, nadita de nada, al menos hasta antes de conocerse la imprudencia papal.
Las diferencias entre el Vaticano y el régimen tricolor son escándalo mayor. Por supuesto se busca dar una salida diplomática, pero la verdad es que con todo y Juan Diego y Guadalupita la clase gubernamental podría ser excomulgada. Y todo por culpa del PRI que en mala hora reta al poder celestial a lucha tan dispareja. Preferible hubiera sido dejar pasar la referencia de Francisco como travesura de cualquier monaguillo pueblerino, total ni que los políticos fueran tan sentidos ni las limosnas tan abundantes.
El asunto es que estas diferencias nos trasladan a la posrevolución, allá cuando Obregón y Calles “hicieron punta” en el combate al clero, lo cual originó lo que se conoce como “La Guerra Cristera” que duró algo más de tres años, se extendió a diez y siete estados y produjo alrededor del millón de difuntos. Entonces Papa Pio X1 se encargó de batallar con los generales revolucionarios y autorizar la señalada confrontación armada y que como sabéis tocó al tamaulipeco Portes Gil desde la Presidencia de la República pacificar al país, aunque el resentimiento religioso por ahí quedó latente y peligroso, tanto que podría surgir en cualquiera de las manifestaciones que permite la globalización y el intercambio de métodos patrocinados por los EU.
De manera que el Vaticano y gobierno tricolor están enfrentados, salven todos los santos que no lleguemos a una guerra parecida a la del 26-29 del siglo pasado. Hay motivos, además del pleito con el Vaticano porque el clero ha sido sometido por el SAT y eso cala cuando se toca el bolsillo.
SUCEDE QUE
Oiga, tan enredadas están las cosas que en Chihuahua se reunieron 250 consejeros electorales de 29 estados, (donde seguramente estuvieron los de Tamaulipas, encabezados por Jorge Luis Navarro Cantú), para protestar contra la decisión el Instituto Nacional Electoral de posponer la discusión sobre normas que frenen la compra y coacción del voto. Ahora resulta. Ese no es el problema, porque a la hora buena cada partido se las ingeniará para entrarle a la mercadotecnia, sino la confrontación que se ve y se siente como otro elemento que podría complicar aún más el proceso de junio. ¿Acaso los estados no se resignan al acuerdo de que el INE organice elecciones locales y nombre consejeros ibídem (en el mismo lugar)?…Mientras tanto al movimiento magisterial de Guerrero ya llegó la muerte. Un maestro pereció después de la golpiza propinada por la policía durante el enfrentamiento de este martes en Acapulco. La crisis aumenta y ni cómo negar que desde hace tiempo rebasó al sistema, por ello no extraña el uso de la fuerza, es decir, la represión simple y llana como en los viejos tiempos…Por otra parte, en cualquier momento se darán a conocer las listas de candidatos pluris del PRI a diputaciones federales, donde se ratificará a Lupita Flores en lugar preferente, al igual que a otra distinguida y carismática dama relacionada con educación, digo, si es que no hay cambios de última hora, ya ve cómo es esto.
Y hasta la próxima.




