CHIHUAHUA, Chihuahua.- Tras el rescate el pasado fin de semana de alrededor de 200 jornaleros, entre los que se cuentan 170 indígenas tarahumaras, que trabajaban en condiciones deplorables en Comondú, Baja California Sur, sólo dos aceptaron regresar a Chihuahua.
El Gobierno de Chihuahua envió a BCS a una comisión para constatar la mejora de condiciones de jornaleros, pero 168 optaron por quedarse en aquella entidad y sólo dos retornarán.
«El Gobierno del estado de Chihuahua coadyuvará en todo lo necesario con las autoridades federales a fin de ofrecer condiciones favorables para el traslado y recepción de dos indígenas chihuahuenses que sufrieron explotación laboral en el estado de Baja California Sur.
«A la vez que se mantendrá atento de la situación de otros 168 que decidieron permanecer en aquella entidad», informó Federico Guevara, coordinador de Comunicación Social del Gobierno estatal.
Unos 200 jornaleros tarahumaras, entre ellos niños y menores de edad, fueron explotados laboralmente por la empresa «Corporativo El Cerezo».
Esta empresa los mantenía en campos de cultivo de papa en condiciones insalubres y de hacinamiento, denunció la Secretaría del Trabajo.
«Según la información obtenida, el grupo de indígenas era conformado por 170 personas, las cuales en este momento ya fueron instaladas en dormitorios adecuados con instalaciones sanitarias, comedores y agua potable», aseguró Guevara.
Paralelamente, los menores podrán asistir a clases, mientras que las condiciones de vida y trabajo de los jornaleros que laboran para la empresa «El Cerezo» serán supervisadas por autoridades federales y estatales.
«El Gobierno del estado de Chihuahua mantiene el firme compromiso de velar por los intereses de los trabajadores del campo, y celebra la intervención de las autoridades federales para erradicar prácticas reprobables en materia laboral», aclaró el funcionario.
Los jornaleros fueron contactados por enganchadores, quienes les pagaban el traslado desde sus comunidades de origen al centro de trabajo, en Baja California Sur, además de concentrarlos en campamentos improvisados que carecían de agua y servicios básicos.
