LO CLARO. Acaso a los investigadores científicos, que laboran ‘a puerta cerrada’ en bien de la humanidad, poca gloria y reconocimientos les otorgue la sociedad, por su entrega.
Un caso encomiable, lo representa una dama. Por origen, tiene la ciudad de Matamoros, Tamaulipas.
Su contribución en el campo científico-forestal, hecho al país y al mundo, le han valido reconocimientos como el que el presidente en funciones Felipe Calderón, le otorgara como Premio Nacional de Ciencias y Artes, en 2008.
Muchas otras preseas de reconocimiento a sus aportaciones, ha recibido este talento mexicano, de nombre María de los Ángeles Valdés Ramírez.
Y éstas, tienen qué ver con sus investigaciones en torno a la reforestación, mediante el uso selectivo de microorganismos inoculados -o manipulados, según el punto de vista-.
Los resultados, ya campean en zonas como el Valle de México y en no menos de 6 países (Japón, Estados Unidos, Alemania entre otros).
La doctora, será de nuevo homenajeada. Ahora con la medalla al mérito por sus aportaciones hechas en bien de la humanidad, que otorga el Congreso Local del Estado de Tamaulipas.
Ya ha sido candidata al premio UNESCO (1998) y habría expresado al recibir la que el presidente de la nación le obsequió: (sic) “-es una satisfacción que se reconozca el trabajo que realizamos muchos investigadores, para ser útiles a la sociedad…”
LO OSCURO. Y en el tema de utilidad a la nación; el mandatario nacional ha tomado el compromiso de cara al país, para anunciar lo que significará la recomposición del gasto presupuestario, que significará el 2016.
Como todos sabemos, el presente 2015 tiene un refrendo amparado por la compra de un seguro ‘catastrófico’ que ampara al presupuesto de egresos 2015, que se apalanca en el ingreso petrolero.
A la abrupta caída del precio del crudo, con el seguro de riesgos contratado, éste no compromete al precio del barril para sustentar los mismo egresos en 2016 (dependemos en un 33% de la economía de ingresos, para financiar el gasto del aparato gubernamental).
Ha dicho el presidente: “El gobierno federal, se compromete a renovarse y hacerse más eficiente, para hacer más con menos recursos”. Y abundó: “pudiendo haber tomado otras medidas –como recurrir al crédito, o eventualmente implementar nuevos impuestos- no hemos recurrido a ello”.
Citó “Es claro que el gobierno (.) también debe transformarse; por eso se revisará cada una de las entidades para evitar duplicidades y encontrar áreas de oportunidad”.
Bien, cuando la reingeniería compromete al ente gubernamental a la austeridad, en tiempos que toda la población se ha ajustado aún más el ya de por sí, apretado cinturón.
Pero quizá no saben los asesores del presidente, una de esas áreas de oportunidad que habla el mandatario.
No se preocupen, para eso estamos (esperemos que los espacios de opinión no tiendan a desaparecer, como la tauromaquia).
Según INEGI, se contabilizan a la fecha 4 millones 190 mil personas que laboran en la burocracia municipal, estatal y federal.
Sólo los adscritos a la federación, rondan 1 millón 700 mil empleados. Cifras muy conservadoras, como las del SNTE.
En el sexenio zedillista, la plantilla laboral significaba un egreso de 383 mil millones de pesos. Fox, apenas la subió a 610 mil mdp. ¿Calderón? ¿Austero? Quizá; si considera que su gasto en nómina representaba 926 mil mdp.
Entre ambos muchachos panistas, alzaron la plantilla y el gasto en ésta, la friolera de 142% de incremento.
Entrados en gastos, y partiendo de lo dicho por el presidente en el sentido de “renovarse y partir desde cero”, quizá analizar el darle las gracias a miles de compromisos y realmente hacer más con menos, sería una buena señal. Pemex así lo anunció en su propia reestructura que el tarot le anunció.
COLOFÓN: Y de pasada, que cada quien pague sus gastos en los viajes ¿no?
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